L D (EFE) El médico, acompañado en la rueda de prensa por Emilio Gutiérrez, director de comunicación e imagen del club rojiblanco, y Ana Martínez Serrano, jefa del servicio de salud pública área 6 de la sección Epidemiología de la Dirección General de la Salud Pública, advirtió de que no se ha suministrado ninguna sustancia prohibida por la ley actual del dopaje ni en mal estado a la plantilla. "Creo que en estos momentos no se puede llegar a una conclusión definitiva de la causa ni se podrá llegar. Y en realidad lo que sí puedo decir que de esos más de mil millones de casos anuales en nuestra planeta, la mayor parte tiene una etiología desconocida, o sea no se sabe cuál ha sido la causa", explicaba Villalón. El jefe de los servicios médicos del Atlético destaca que, "una vez concluidos los informes y los análisis realizados, la gastroenteritis aguda puede ser de etiología inespecífica, dudosa o desconocida o de etiología bacteriana, viral, parasitaria o tóxica".
Aún así, Villalón explica: "Las características epidemiológicas y clínicas y la alta incidencia que han tenido en nuestro colectivo, 18 jugadores y 3 auxiliares, y la rápida difusión del proceso, permiten atribuir como probable origen del cuadro a una toxi-infección vírica". "Las encuestas epidemiológicas realizadas a los profesionales concentrados en Las Rozas no pueden atribuir a ningún alimento concreto la condición de vector específico de transmisión", comenta el doctor, quien ha añadido que "la forma de transmisión más frecuente corresponde a alimentos, agua o vía área, persona a persona". El médico ha advertido, además, de que "ninguno de los auxiliares afectados de la plantilla ingirió los habituales suplementos nutricionales, todos ellos productos farmacéuticos de absoluta garantía y amplia difusión entre los deportistas de alto rendimiento de nuestro país".
La lista de principios activos que contienen esos suplementos nutricionales es la siguiente: Dextrosa, Lactosa, árnica, sarcolactato de zinc, estearato de magnesio ácido, jalea real, taurina, inositol, policosanoles, vitamina C, l-carnitina, selenio, beta caroteno, vitamina E, aspartato de argimina y sorbitol. "Es necesario aclarar -continuaba- que no se ha suministrado ninguna sustancia prohibida en la normativa vigente de la actual ley del dopaje. Segundo, no se ha suministrado ninguna sustancia caducada ni en mal estado. Y tercero, no se ha suministrado ninguna en dosis o por vía de administración inadecuada que pudiera haber producido el cuadro gastroentérico". "Por último hay que decir que los suplementos nutricionales usados tienen como objetivo primordial preservar la salud del futbolista y hacerlas compatibles con las altas cargas de trabajo físico a las que están sometidos durante los entrenamientos y la competición", explica.
Villalón destaca que desde el punto de vista clínico la gastroenteritis sufrida por los jugadores rojiblancos fue un "cuadro leve desde el punto de vista sintomático y recortado en el tiempo, ya que su duración ha sido escasa y afortunadamente no ha tenido ninguna secuela en ninguno de los casos presentados". El jefe de los servicios médicos señala, sobre los análisis, que fue la propia entidad de la Ciudad del Fútbol la que mandó "a un laboratorio privado una serie de alimentos, que no corresponden a la totalidad de alimentos que han consumido los jugadores", para analizar una posible causa de la gastroenteritis. "A las 24 horas se produce la notificación de la Comunidad de Madrid, en este caso al servicio de salud pública del área 6, del brote epidémico y hacen una inspección en el centro, una encuesta epidemiológica entre afectados y no afectados y, en algunos casos, una recogida de heces, para un estudio microbiológico de virus, bacterias o toxinas que pudiera haber. Este no detecta ninguna toxina, ni tóxico ni virus o bacteria", añade.
Ana Martínez Serrano, jefa del servicio de salud pública área 6 de la sección epidemiología a la Dirección General de la Salud Pública, explicó que se llevaron a cabo "controles de agua", que estaba "en perfecto estado". "Puede ser por vía aérea. No es necesario que sea a través de un alimento", añade. "Es un mecanismo en estos momentos desconocido. No tenemos todas las pruebas como para poder asegurar cuál es la vía, pero lo más probable es que sea vírico y no identificada la causa", concluyó.
Aún así, Villalón explica: "Las características epidemiológicas y clínicas y la alta incidencia que han tenido en nuestro colectivo, 18 jugadores y 3 auxiliares, y la rápida difusión del proceso, permiten atribuir como probable origen del cuadro a una toxi-infección vírica". "Las encuestas epidemiológicas realizadas a los profesionales concentrados en Las Rozas no pueden atribuir a ningún alimento concreto la condición de vector específico de transmisión", comenta el doctor, quien ha añadido que "la forma de transmisión más frecuente corresponde a alimentos, agua o vía área, persona a persona". El médico ha advertido, además, de que "ninguno de los auxiliares afectados de la plantilla ingirió los habituales suplementos nutricionales, todos ellos productos farmacéuticos de absoluta garantía y amplia difusión entre los deportistas de alto rendimiento de nuestro país".
La lista de principios activos que contienen esos suplementos nutricionales es la siguiente: Dextrosa, Lactosa, árnica, sarcolactato de zinc, estearato de magnesio ácido, jalea real, taurina, inositol, policosanoles, vitamina C, l-carnitina, selenio, beta caroteno, vitamina E, aspartato de argimina y sorbitol. "Es necesario aclarar -continuaba- que no se ha suministrado ninguna sustancia prohibida en la normativa vigente de la actual ley del dopaje. Segundo, no se ha suministrado ninguna sustancia caducada ni en mal estado. Y tercero, no se ha suministrado ninguna en dosis o por vía de administración inadecuada que pudiera haber producido el cuadro gastroentérico". "Por último hay que decir que los suplementos nutricionales usados tienen como objetivo primordial preservar la salud del futbolista y hacerlas compatibles con las altas cargas de trabajo físico a las que están sometidos durante los entrenamientos y la competición", explica.
Villalón destaca que desde el punto de vista clínico la gastroenteritis sufrida por los jugadores rojiblancos fue un "cuadro leve desde el punto de vista sintomático y recortado en el tiempo, ya que su duración ha sido escasa y afortunadamente no ha tenido ninguna secuela en ninguno de los casos presentados". El jefe de los servicios médicos señala, sobre los análisis, que fue la propia entidad de la Ciudad del Fútbol la que mandó "a un laboratorio privado una serie de alimentos, que no corresponden a la totalidad de alimentos que han consumido los jugadores", para analizar una posible causa de la gastroenteritis. "A las 24 horas se produce la notificación de la Comunidad de Madrid, en este caso al servicio de salud pública del área 6, del brote epidémico y hacen una inspección en el centro, una encuesta epidemiológica entre afectados y no afectados y, en algunos casos, una recogida de heces, para un estudio microbiológico de virus, bacterias o toxinas que pudiera haber. Este no detecta ninguna toxina, ni tóxico ni virus o bacteria", añade.
Ana Martínez Serrano, jefa del servicio de salud pública área 6 de la sección epidemiología a la Dirección General de la Salud Pública, explicó que se llevaron a cabo "controles de agua", que estaba "en perfecto estado". "Puede ser por vía aérea. No es necesario que sea a través de un alimento", añade. "Es un mecanismo en estos momentos desconocido. No tenemos todas las pruebas como para poder asegurar cuál es la vía, pero lo más probable es que sea vírico y no identificada la causa", concluyó.