L D (EFE) "Tuve suerte con el resbalón de Terry, pero también pude parar el de Ashley Cole", señalaba Van der Sar en rueda de prensa al término del partido.
El guardameta reconoce que soñaba con un momento como éste desde que vio por televisión la final de la Copa de Europa que ganó el PSV Eindhoven a los penaltis en 1988. "El sentimiento tras parar un penalti es inmenso, indescriptible. Sabía que era complicado y que todo depende de la calidad de los tiradores", apunta.
Con todo, rompe una lanza en favor de Terry, al asegurar que "no hace falta ser delantero para ser un buen tirador de penaltis". "En el fútbol, como en la vida, las pequeñas cosas pueden cambiarlo todo. Me siento muy feliz", asevera.
Van der Sar, que fichó por los "diablos rojos" hace tres temporadas con 34 años recién cumplidos, ya se alzó con la Liga de Campeones en 1995 con el Ajax tras derrotar en la final al Milan. "No estoy acabado. Lo que no sé es por qué el Manchester no me fichó antes", decía.