Van den Hoogenband roza el récord del mundo de los 200 libres y avisa a Michael Phelps

L D (EFE) En el que será su último mundial, Van den Hoogenband ha hecho el mejor tiempo de las series de la mañana y de las semifinales, y pasaba el primer 100 por debajo de la mejor marca mundial que tiene precisamente la última gran estrella de la natación australiana, Ian Thorpe, retirado oficialmente en noviembre pasado. El holandés paró el crono en 1:46.33, a más de dos segundos del 1:44.06 que tiene Thorpe desde los Mundiales de Fukuoka en 2001. Phelps, por su parte, ganó cómodamente la primera semifinal con 1:46.75, por delante del australiano Kenrick Monk, con 1:47.45, y del chino Lin Zhang, que logró 1:48.29.

Van den Hoogenband ha superado en la suya al italiano Massimiliano Rosolino, otro histórico nacido como el holandés en 1978, con 1:46.33 por 1:47.34 y 1:47.83 del surcoreano Tae Hwan Park, tercero en la serie más rápida. Park se proclamó el domingo campeón de los 400 y dio la sorpresa al derrotar al australiano Grant Hackett, el gran dominador de la distancia en los últimos años desde la retirada de hecho de su compatriota Ian Thorpe tras los Juegos de Atenas.

Antes, el estadounidense Ryan Lochte había batido el récord de los campeonatos, en las semifinales de los 100 metros espalda con un tiempo 53.51. El anterior mejor registro estaba en poder del americano Aaron Peirsol, campeón olímpico en Atenas 2004 y en esta ocasión tercero en las suma de las dos semifinales, desde Barcelona 2003 con 53.61. En segundo lugar en la salida para la final del martes será para el británico Liam Tancock con 53.71 por delante de Peirsol, que todavía mantiene la mejor marca mundial con 53.17 desde que la rebajara en 2005 en Indianápolis.

Otro récord de los campeonatos fue el de los 200 estilos femeninos. La estadounidense Kathrin Hoff rebajó el que ella misma tenía desde hace dos años en 2:10.41 con un registro de 2:10.13 para proclamarse campeona del mundo, en una final en la que la argentina Georgina Bardach fue séptima. Hoff revalidó su título por delante de la zimbabuense Kirsty Coventry, con 2:10.76, y de la australiana Stephanie Rice, medallista de bronce con 2:11.42.

En los 50 mariposa, el surafricano Roland Schoeman se proclamó campeón del mundo al derrotar al estadounidense Ian Crocker y al danés Jacoj Andkjaer. El africano revalidó su título en esta distancia conseguido en Montreal en 2005 cuando batió el récord mundial y estableció una mejor marca de 22.96. Crocker consiguió la medalla de plata con 23.47, Andkjaer la de bronce con 23.56 y el venezolano Albert Subirats fue cuarto con 23.57. Subirats se quedó a una centésima del bronce.

El pulso para dirimir la supremacía en la natación femenina entre estadounidenses y australianas vivió un nuevo capítulo y fue, otra vez, a favor de las oceánicas. Lisbeth Lenton logró su segunda medalla de oro en Melbourne 2007 y batió el récord de los campeonatos en los 100 mariposa. Lenton y su compatriota Jessicah Schipper, que había establecido la mejor marca de las finalistas y era la vigente campeona, superaron a la estadounidense Natalie Coughlin en la última brazada. Schipper y Lenton se dieron un sentido abrazo al terminar la prueba ante la algarabía del público australiano que las animó para arrebatar la medalla de oro a la californiana en los últimos metros. La nueva campeona paró el crono en 57.15 para rebajar el de Schipper en Montreal 2005, que era el récord de los mundiales, con 57.23. La mejor marca mundial de los 100 mariposa está en poder de la holandesa Inge de Bruijn, ya retirada de la competición, desde los Juegos Olímpicos de Sydney en 56.61. Lenton marcó 57.15 por 57.24 de Schipper y 57.34 de Coughlin.

En los 100 metros braza los dos dominadores de este estilo en los últimos años, el estadounidense Brendan Hansen y el japonés Kosuke Kitajima, dilucidaron su primer duelo en Melbourne. Kitajima es doble campeón olímpico y Hansen mundial y poseedor del récord universal. Fueron los únicos finalistas que bajaron del minuto y venció el norteamericano que hizo 59.80 por 59.96 del nipón. Hansen dominó la prueba levemente desde el principio y resistió el ataque final del norteamericano para ganar la primera medalla de oro de este estilo. El australiano Brenton Rickard fue medalla de bronce con 1:00.58 delante del ucraniano Valeriy Dymo, cuarto con 1:00.60. Los estadounidenses sumaron dos oros, el de Hansen y Hoff, por uno de las australianos, el de Lenton, y otro de Suráfrica por medio de Schoeman. Mañana se disputará una de las pruebas estelares de la natación mundial en la que Van den Hoogenband y Phelps se jugarán los 200 metros libre.