L D (EFE) El Barça nunca ha ganado en el Calderón con Frank Rijkaard en el banquillo, y Valdés ha sufrido, además, el acierto rematador de Fernando Torres, quien suele firmar ante el conjunto catalán sus mejores actuaciones de la temporada. El portero azulgrana espera que esta vez el 'Niño' no tenga un buen día y que el Barça se lleve los tres puntos. "Es cierto a Torres le han salido las cosas bien contra nosotros, pero cada partido es una historia y esperamos que esta vez sea diferente", comenta al respecto.
Además, Valdés confía además en que el Recreativo de Huelva les eche una mano ganando al Madrid, aunque para ello no cree necesario llamar a Mario Álvarez, ex defensa azulgrana que ahora juega en el Recre y con quien le une una buen amistad, para que motive a su equipo. "No hará falta llamarlo porque Mario ya sabe lo que tiene que hacer. Es un gran amigo mío, ha estado aquí con nosotros y tiene una mentalidad ganadora", explica.
Sea como sea, el Barça ya no depende de él mismo y, a no ser que la clasificación dé un vuelco en estas últimas cuatro jornadas, se quedará sin ganar un título importante justo un año después de encandilar a Europa con otra Liga y una Liga de Campeones. Valdés intenta explicar las causas por las que la situación del equipo ha cambiado tanto en apenas doce meses, pero no se mostró convincente. "Hemos tenido resultados deportivos no esperados, algunas derrotas durante esta temporada no deseadas, pero el equipo no ha cambiado en cuanto a mentalidad y objetivos, lo único es que el fútbol tiene esas cosas y no se han cumplido los objetivos que nos marcamos a principios de temporada", argumenta.
La frustración por estar dándolo todo y, sin embargo, no lograr resultados es, según Valdés, el motivo de que los jugadores estén "cabreados", ya que "ves cómo no te salen las cosas y que la afición está dolida por ello, y las derrotas no te ayudan a mantener el nivel de concentración y motivación ideal".
Además, Valdés confía además en que el Recreativo de Huelva les eche una mano ganando al Madrid, aunque para ello no cree necesario llamar a Mario Álvarez, ex defensa azulgrana que ahora juega en el Recre y con quien le une una buen amistad, para que motive a su equipo. "No hará falta llamarlo porque Mario ya sabe lo que tiene que hacer. Es un gran amigo mío, ha estado aquí con nosotros y tiene una mentalidad ganadora", explica.
Sea como sea, el Barça ya no depende de él mismo y, a no ser que la clasificación dé un vuelco en estas últimas cuatro jornadas, se quedará sin ganar un título importante justo un año después de encandilar a Europa con otra Liga y una Liga de Campeones. Valdés intenta explicar las causas por las que la situación del equipo ha cambiado tanto en apenas doce meses, pero no se mostró convincente. "Hemos tenido resultados deportivos no esperados, algunas derrotas durante esta temporada no deseadas, pero el equipo no ha cambiado en cuanto a mentalidad y objetivos, lo único es que el fútbol tiene esas cosas y no se han cumplido los objetivos que nos marcamos a principios de temporada", argumenta.
La frustración por estar dándolo todo y, sin embargo, no lograr resultados es, según Valdés, el motivo de que los jugadores estén "cabreados", ya que "ves cómo no te salen las cosas y que la afición está dolida por ello, y las derrotas no te ayudan a mantener el nivel de concentración y motivación ideal".