L D (EFE) Los nuevos modelos han sido diseñados por el ingeniero Mike Gascoyne, que ha tomado prestados muchos detalles del Renault R23 con el que Fernando Alonso se convirtió en el piloto más joven en ganar una prueba del mundial al imponerse en el Gran Premio de Hungría.
Toyota ha sido la primera escudería en presentar el coche que tomará la salida el próximo seis de marzo en el Gran Premio de Australia. Los ingenieros, encabezados por el italiano Luca Marmorini, empezarán a probarlo este lunes en el circuito de Jerez de la Frontera, en Cádiz.
El principal objetivo en cuanto al motor, que se va a utilizar en dos Grandes Premios, es que mantenga la misma potencia que el año anterior en los aproximadamente 1500 kilómetros que deberá rodar. Otro de los cambios en el modelo de este año con respecto al del anterior es la elevación del alerón delantero y el adelantamiento del trasero, lo que hará que los coches pierdan un 25 por ciento de su eficacia aerodinámica. El objetivo de los ingenieros es reducir esta pérdida en la medida de lo posible.
El japonés Tsutomo Tomita, director del equipo, quiere que con el TF105 presentado este sábado la escudería se sitúe entre las primeras del Mundial. Para llegar a algo este año, Toyota cuenta con dos pilotos nuevos, el italiano Jarno Trulli, que ya disputó dos Grandes Premios con el equipo el año pasado después de su controvertida salida de Renault, y el alemán Ralf Schumacher. El francés Olivier Panís será el piloto de prueba de la escudería y el brasileño Ricardo Zonta se encargará de hacer rodar el coche los viernes por la mañana en los entrenamientos libres de los Grandes Premios.