Esta ha sido la cuarta 'pole' del veterano piloto italiano y la primera de Toyota esta temporada, y tercera en su historia, con la que la escudería japonesa, asentada en Alemania, toma el relevo de las actuaciones en el día de la clasificación de Brawn y Red Bull, las sensaciones en las tres primeras carreras del mundial.
El piloto de Pescara, en su quinto año en Toyota, ha dado la campanada en Bahrein, donde se esperaba un nuevo recital de los Brawn, que, si bien han completado buenas actuaciones en las clasificaciones oficiales, han perdido todo el protagonismo en favor de los dos TF109, de Trulli y Glock.
Toyota ha participado en casi 130 Grandes Premios en su tránsito por la F1 y nunca ha ganado una carrera, opción que se le presentará este domingo, si el tiempo no se tuerce por la previsión que existe de riesgo de tormenta de arena.
Tras los dos Toyota, Brawn tiene en la segunda (Jenson Button) y tercera línea (Rubens Barrichello) a sus dos coches, que estarán junto a Sebastian Vettel y Lewis Hamilton, este último en clara ascensión desde el arranque infructuoso del mundial. Estos seis pilotos son los que precederán a un Fernando Alonso que ha logrado el séptimo mejor registro en la Q3, posición que el viernes ya daba por buena, aunque tenía serias dudas de que estuviese a la altura para abordarla.
El piloto asturiano realizó dos intentos en la Q3. En el primero de ellos obtuvo el sexto mejor registro, pero en el segundo perdió algo de tiempo en el primer sector y no pudo mejorar su crono. El sofocante calor que ha acompañado a las tandas de clasificación oficial, con 38 grados de temperatura de ambiente y 50 en la pista, aunque con una humedad del 15%, ha convertido la matinal en un calvario para los pilotos dentro de sus monoplaza.