L D (EFE) El coche del ciclista, que se dirigía al aeropuerto de Bruselas en el momento del siniestro, sólo sufrió daños materiales, según ha explicado un portavoz policial, que ha asegurado además que Boonen no cometió ninguna infracción.
En más de una ocasión, el esprinter del Quick Step ha tenido problemas con la justicia por su afición a la velocidad. Durante esta primavera, el ciclista perdió en dos ocasiones su permiso de conducir durante dos semanas por circular por encima del límite permitido y por hacerlo bajo los efectos del alcohol.
Boonen, uno de los mayores ídolos deportivos en Bélgica, ha protagonizado en los últimos años varias polémicas fuera de competición, incluido un control positivo por cocaína que el corredor reconoció.