Y todo ello suponiendo que Tiger cavile, porque el juego que exhibe se aproxima más al de un robot que al propio de un humano que viaja, cambia de hoteles y, en teoría, acumula cansancio. Woods hizo cinco 'birdies' sin errores, recogió sus trastos y se marchó de Hazeltine a esperar a que nadie le supere cuando se dé por terminada la primera ronda.
El asalto al liderato de Woods, no obstante, parece poco probable, pues Hazeltine se ha mostrado como un recorrido largo y exigente que sujeta los marcadores y no perdona los errores de bulto. Hazeltine parece, por el momento, el punto y seguido a la trayectoria reciente de Tiger. El mejor del planeta, robotizado, parece que no le afectan los cambios, las alteraciones ni el clima. El domingo pasado Tiger ganó el Bridgestone Invitational, en el Firestone Country Club, dejando en la cuneta en el hoyo 16 de la última ronda al irlandés Padraig Harrington, al final, qué remedio, relegado al segundo puesto.
Una semana antes de anonadar a Harrington, a la sazón defensor del título de este Campeonato PGA y primer europeo en ganarlo, Tiger venció con holgura el Buick Invitational. En el último 'grande' del curso, el mejor golfista del mundo sigue sin bajarse del primer puesto, en busca de su decimoquinto título de 'Grand Slam' y la posibilidad de sumar el quinto entorchado de este campeonato, para igualar el récord que comparten Jack Nicklaus y Walter Hagen. Harrington, como el domingo pasado, es segundo, a un golpe de Tiger.
Por detrás se agolpan un nutrido grupo de jugadores con -3, entre ellos el gaditano Álvaro Quirós, que apunta buenas perspectivas para conseguir algo sonado en este campo. Los australianos Goggin y Allenby, además del estadounidense Mahan, comparten el tercer puesto momentáneo con el español Quirós.
Sergio García también ha rematado una sólida puesta en acción con 71 golpes (-1), aunque esparció mejores sensaciones que pueda reflejar el resultado tras 18 hoyos. Miguel Ángel Jiménez y Gonzalo Fernández-Castaño están en juego, al igual que los argentinos Ángel Cabrera y Andrés Romero. El colombiano Camilo Villegas se complicó el día y acabó con 73 golpes.