El refugio de Rafa Nadal tras su retirada

Rafa Nadal ha anunciado que cuelga la raqueta una vez pasada la Copa Davis que será en noviembre. La leyenda del tenis mundial ha dedicado un emocionado vídeo hablando de su vida como tenista y como persona, haciendo mención especial a su mujer y su hijo, sin olvidar que ha ganado 22 Grand Slams. Es evidente que Nadal se ha ganado a pulso descansar por fin y disfrutar de su familia y nada mejor para ello que una lujosa mansión en Porto Cristo (Mallorca).

La increíble casa de Rafa está situada frente al mar y, según los informes, cuenta con más de 1.000 metros cuadrados de edificación. También está cerca de la popular Sa Cova de Correus. Hay que recordar que este núcleo costero de Manacor es familiar del tenista y donde siempre ha querido vivir, además se encuentra apenas a 12 kilómetros de la Rafa Nadal Academy. Es importante destacar que Nadal siempre ha sido muy reservado con todo lo que es su vida privada, tanto su familia y su entorno como su casa, pero ahora se conocen más detalles de la impresionante mansión que adquirió en 2013.

Nadal compró este chalet frente al mar por 4 millones de euros. Consta de dos pisos con un sótano donde ha podido hacerse un gimnasio, pero además la propiedad cuenta con piscina, comedor de verano y zona de estar, todo ello exterior. El interior tampoco se queda atrás ya que, inspirada en la arquitectura típica de Mallorca, la casa cuenta con tres salones y habitaciones con chimenea, y un acceso privado al mar a través de una escalinata de piedra que desemboca en un acantilado.

Un oasis de tranquilidad hecho a medida

Hay que destacar que el tenista ha tardado toda una década en poder instalarse en su casa junto a su familia, mientras seguía cosechando éxitos en su carrera profesional e incrementaba una fortuna personal que se calcula en unos 300 millones de euros. La gran vivienda cuenta con dos edificios conectados con dos plantas más un sótano. En ella destacan sobre todo sus amplios ventanales y las diferentes terrazas con vistas al mar.

En general siempre ha sido muy discreto, por lo que son escasos los detalles que ha enseñado el tenista del interior de su casa. Aunque por lo poco que ha mostrado en sus redes sociales se aprecia una decoración minimalista a la que es aficionado y un gimnasio de estilo rústico con paredes de ladrillo y tecnología de vanguardia.

7.000 metros de terreno

Hay que recordar que la vivienda tiene algo más de 1.000 metros, pero el conjunto de edificios que la componen están construidos sobre un terreno de 7.000 metros en primera línea de mar. Y, desde que la comprara en 2013, Nadal se ha encontrado con algunas trabas burocráticas por su ubicación. No es de extrañar ya que el conjunto se encuentra en primera línea de mar, tanto que se accede a un acantilado por medio de una escalinata. Esta nueva residencia de Nadal incluye un chalet típico mallorquín de piedra y otras construcciones menores, que pertenecía a los herederos de una de las dueñas de las Cuevas del Drach. En estos siete años, el tenista ha echado abajo casi todo lo construido y por fin las obras se han completado.

Tres salones y espectaculares vistas

Según un anuncio de la casa que fue publicado en un portal de compra-venta de viviendas, la mansión "cuenta con 1.200 m2 y está dentro de un terreno de 7.000 m2 en primera línea de mar. Tiene tres salones, varias habitaciones con chimeneas, gimnasio, desván y garaje y otras construcciones a lo largo del terreno y cuenta con unas espectaculares vistas al mar ".

Hay que recordar que la ubicación no es baladí ya que se encuentra cerca la residencia de los abuelos, tíos y padres del tenista. Además, la compra de Rafa Nadal puso fin al temor de los vecinos a que se construyera un edificio de apartamentos en esta zona. No en vano, la propiedad habría sido objeto de interés de inversores suizos, alemanes y rusos, todos con la intención de tirar abajo las casas y construir hasta 75 apartamentos.

Su otra mansión... flotante

El tenista español, como cualquier persona, tiene aficiones fuera de su trabajo y una de sus pasiones es el mar y la navegación. Era su manera de desconectar del mundo, y no lo hacía de cualquier manera. Hasta hace poco tiempo, las excursiones las realizaba en el yate Beethoven pero su nuevo catamarán le ofrece una cantidad de lujos y comodidades de las que carecía en la anterior embarcación. El yate del tenista mallorquín, un Sunreef 80, tiene 26 metros de eslora y ocho camas para albergar hasta 12 invitados y alcanza una velocidad máxima de 23 nudos, que en crucero es de 16 nudos. Está valorado en 5,5 millones de euros, además de las numerosas habitaciones tiene también spa, piscina de hidromasaje y bar. Por si navegar no es suficiente....

Su imagen es espectacular y la suite principal es la joya del barco, ya que cuenta con una cama doble que da a la terraza de proa, un baño con ducha a ras de suelo, vestidor y escritorio. Además cuenta con una lancha auxiliar para desembarcar y hacer excursiones y también motos de agua. Pero no solo eso y es que el tenista y sus amigos pueden disfrutar también de jacuzzi y una zona lounge: con bar, tumbonas, barbacoa y una barra con un grifo de cerveza. Además, Rafa Nadal tiene en este catamarán un pequeño garaje para albergar un jetski y juegos acuáticos para divertirse con sus amigos.