El Abierto de Australia acentúa la incertidumbre en torno al torneo después de la llegada de un tercer avión con tenistas a bordo y afectados por la presencia de un positivo con coronavirus. Tras el nuevo positivo encontrado en el vuelo QR7485 desde Doha a Melbourne, ya son cinco el número de pasajeros infectados que han aterrizado en Australia para estar presentes en el primer Grand Slam de la temporada. En este caso, según las informaciones locales, los positivos serían un miembro de la tripulación y un entrenador.
Los primeros dos aviones infectados obligaron a un total de 125 pasajeros a confinarse en sus habitaciones por un periodo de dos semanas en el que el único entrenamiento permitido se reducirá tanto al uso de la bicicleta estática instalada en los dormitorios como a los ejercicios físicos que puedan desarrollar en reducidas dimensiones.
En este último avión estaban los 16 jugadores que habían pasado la previa, los lucky losers y algún repescado de última hora. Entre ellos están los españoles Carlos Alcaraz, el tenista que ha logrado clasificarse con tan solo 17 años, y Mario Vilella, así como el entrenador y ex número uno Juan Carlos Ferrero. Permanecen confinados en las habitaciones de su hotel en Melbourne, tras haber viajado en este avión desde Doha después de firmar su pase al cuadro final. En total son ya 72 tenistas aislados en sus habitaciones: 24 procedentes de Los Ángeles, 23 que venían de Abu Dabi y otros 25 que tomaron su avión en Doha.
Este nuevo caso sacude de lleno a los torneos que tienen previsto disputarse en suelo australiano, la Copa ATP y el Abierto. Pese a las quejas de los tenistas, con resultados negativos en sus PCR, las autoridades australianas defienden a rajatabla las medidas contra la covid-19 aceptadas para los tenistas y miembros de su equipo a la llegada al país para participar en el Abierto. Sin embargo, varias tenistas como Belinda Bencic Alize Cornet, Sorana Cirstea y Yulia Putintseva denunciaron el desconocimiento de la severidad de estas medidas anti-covid aplicadas para los pasajeros que comparten avión con un caso positivo.
"Si están en el avión por 16 o 24 horas con el aire que circula dentro de la aeronave, eres considerado un contacto cercano, no vamos a plantear un cambio en esto", afirmó Emma Cassar, comisionada para Cuarentenas de la covid-19
"Lo que no entiendo es eso, nadie nos dijo nunca nada de que si una persona a bordo resultaba positiva todo el avión debería someterse a cuarentena. Lo habría pensado mejor de haberlo sabido", explicó Putintseva en su cuenta de Twitter. Cirstea, por su parte, aseguró que no hubiera disputado la gira australiana de haber conocido la medida aplicada y explicó que la organización les comunicó que serían considerados un contacto cercano aquellos que estaban sentados cerca de la persona infectada
Djokovic pide "respeto e igualdad"
El tenista Novak Djokovic, según ha desvelado Punto de Break, ha salido en defensa de todos los compañeros que están aislados. A través de una carta, ha solicitado mejores condiciones para todos los afectados y pide "igualdad" de cara a los torneos que se avecinan.
En la carta, el serbio hace estas peticiones:
- Material de fitness y entrenamiento en todas las habitaciones
- Comida decente, acorde al nivel del torneo y de un deportista de élite
- Rebajar los días de aislamiento para los 47 jugadores aislados, efectuando más test que confirmen que todos son negativos
- Permiso para visitar a tu entrenador o preparador físico, siempre y cuando ambos hayan superado la PCR
- En caso de tener luz verde la propuesta anterior, que tanto el jugador como su entrenador estén en la misma planta del hotel
- Mover, en la medida de lo posible, a la mayor cantidad de tenistas a casas privadas con pista para entrenar
La carta tenía como destinatario a Craig Tiley, director del Abierto de Australia, quien afirmó en la televisión local que el torneo "se disputará sin retrasos" a pesar de estos incidentes. Mantiene el 8 de febrero porque ya sabían que "existirían este tipo de riesgos".