Rafa Nadal se encuentra a las puertas de jugar su penúltimo torneo de la temporada, el Masters 1000 de París Bercy. Después disputará la Copa de Maestros en Londres y así finalizará una temporada atípica en la que ha cosechado, como casi siempre, otra edición más de Roland Garros.
A días de su debut en París, Nadal ha concedido una entrevista al medio italiano Corriere della Sera y ha charlado de muchos cosas, entre ellas de su sentimiento español: "Me siento profundamente manacorí, mallorquín, español y europeo. Y me siento cuatro veces afortunado".
Pese a no querer "hablar de política" Nadal se refirió sin pelos en la lengua a la situación que vive su país tanto a nivel de salud como a nivel económico: "Soy español, y estoy feliz de serlo. Por supuesto, cuando llega la factura de impuestos, estoy un poco menos feliz. Pero tuve la suerte de nacer en un país con muchas virtudes, lo que me dio una buena vida. "Hay que tener equilibrio. Hacia nosotros mismos, hacia nuestros seres queridos, hacia los demás. Y con responsabilidad y lógica. La gente muere a causa del virus, pero también puedes morir de hambre. El golpe a la economía fue muy severo. Necesitamos encontrar el equilibrio entre salud y trabajo, entre salud y protección social. La seguridad es primordial, pero también lo son la libertad y la dignidad".
Por otro lado, Nadal, pese a ser una bestia física, tiene el mismo respeto al coronavirus que el resto de seres humanos: "Todavía soy bastante joven, sigue respondiéndome el físico. Sin embargo, si me contagio, puedo contagiar a personas de riesgo. Estoy preocupado por mis padres, por mi familia, por mi comunidad. Es el momento más difícil de nuestra vida. Por eso es hora de luchar por cosas mucho más importantes que un partido de tenis. Debemos cultivar la confianza".