Rafa Nadal vuelve a encender las alarmas

Rafa Nadal vuelve a encender las alarmas. El número dos del mundo decidió se dio de baja este miércoles del torneo de Brisbane por una pequeña lesión en su pierna izquierda. Exento de la primera ronda, debía debutar hoy contra el francés Jo-Wilfried Tsonga, pero prefirió no forzar su físico de cara al comienzo del Open de Australia, el próximo 14 de enero en Melbourne. "Me hicieron una resonancia magnética y se vio una pequeña distensión en mi muslo izquierdo", explicó el jugador, de 32 años.

Los médicos le aconsejaron prudencia y el torneo de Brisbane, un ATP 250, no animaba a forzar. "Me dijeron que es una cosa muy pequeña, pero que puede llegar a ser peor, porque una distensión en el músculo es peligrosa. Cuando incrementas la intensidad en el músculo al competir hay un gran riesgo de que se haga más grande", señaló Nadal.

Entiende que tendrá margen para ponerse a punto de cara a su estreno en Melbourne. "Me siento mejor que hace cuatro días. Probablemente estaré al cien por cien en cinco días. Y entonces tendré bastante tiempo para preparar Melbourne", apuntó Nadal, que solo se rodó con un partido ante Kevin Anderson, que perdió en el torneo de exhibición de Abu Dabi hace una semana.

El mallorquín, operado en noviembre en el tobillo derecho, no compite en partido oficial desde su retirada en semifinales del US Open el pasado mes de septiembre ante el argentino Juan Martín Del Potro. La pasada semana, después de perder ante Anderson, renunció a disputar al día siguiente el partido por el tercer puesto, de nuevo por problemas físicos, el lastre que ha condicionado su carrera.

Dentro de unas semanas se cumplen diez años del único título de Nadal en Melbourne. La primera vez que derrotaba en la final de un grande sobre pista dura a Roger Federer. Después de un partido extenuante, el suizo confesó entre lágrimas en la entrega de premios: "Esto me está matando".