Es el rey de París y el emperador de la tierra batida, pero en su discurso tras su décimo Roland Garros conquistado, Rafa Nadal ha decidido elogiar al lugar que, junto a otros escenarios, le ha hecho tan grande en el deporte mundial. París es uno de sus hogares.
"Ganar la décima aquí es muy especial. Gracias a todos. Estoy muy emocionado y mi francés es muy malo y ahora incluso peor porque estoy muy emocionado", comentó Nadal en pleno discurso en francés.
Rafa también tuvo tiempo para hablar de su tío Toni. Sin él todo hubiese sido diferente según Nadal: "Lo siento por hoy, pero Stan: has hecho dos semanas increíbles de tenis. Es difícil hablar pero lo único que puedo decir es gracias por todo. Y gracias, sobre todo, a mi tío que ha estado conmigo desde los tres años y sin él no habría sido posible ganar ninguno. Sentir el apoyo de la grada de París es una sensación única. Gracias, y hasta el año que viene".
Wawrinka, que nunca tuvo sensaciones de ganar a Rafa, se rindió ante el campeón: "Lo que estás haciendo en el deporte es algo increíble y siempre fue un honor enfrentarme a ti, esta vez en la segunda final de Grand Slam. Felicidades tanto a ti como a todo tu equipo".