David Ferrer está viviendo una temporada muy complicada a nivel de juego y sensaciones. Poco a poco ha ido mejorando su tenis, pero en Madrid sufrió para derrotar en primera ronda al kazajo Kukushkin y en octavos no pudo con el japonés Kei Nishikori, en el segundo encuentro que disputó en la capital de España, pues el de segunda ronda ni siquiera lo jugó por la incomparecencia del francés Jo-Wilfried Tsonga por problemas en un hombro.
Ferrer siempre nadó contracorriente en la Pista Arantxa Sánchez Vicario de la Caja Mágica porque nunca tuvo el control del partido. El jugador de Jávea arrancó el duelo muy mal merced a un parcial de 1-4 de su rival. El español tiró de su habitual garra para no darse por vencido y aguantar vivo el resto del set, pero lo acabó cediendo por 4-6.
Con la derrota inicial ya sobre sus hombros, David Ferrer siguió remando en la segunda manga aguantando en el inicio, pero cediendo en cuanto Nishikori dio rienda suelta a su enorme y contundente repertorio de golpes. Al nipón ni siquiera le tembló el pulso cuando llegó el parón por la lluvia y al reiniciar el choque, ya con la pista cubierta, Kei se deshizo de Ferrer con el definitivo 3-6.
La Armada española sigue quedándose sin efectivos aunque todavía queda mucho Mutua Madrid Open para cambiar esa dinámica.