Duro cuadro para Rafa Nadal en el Masters 1000 de Roma -quinto de la temporada y tercero en tierra batida- ante su posible enfrentamiento contra Novak Djokovic en cuartos de final. Un duelo que llegaría demasiado pronto entre el español y el serbio, que el pasado domingo conquistó en Madrid su vigésimo noveno título de Masters 1000 tras derrotar en la final a Andy Murray.
Así, Nadal dice que"obviamente" no está "contento" ante la posibilidad de cruzarse con Nole en la antepenúltima ronda del torneo romano, aunque prefiere centrarse en su inminente duelo de este miércoles contra el alemán Philipp Kohlschreiber, correspondiente a la segunda ronda y que será el debut del manacorense en las pistas del Foro Itálico.
"Obviamente no estoy contento, pero no jugaré con él mañana. Jugaré contra Kohlschereiber, que lo está haciendo bien. Ganó en Múnich, llegó a las semifinales también en Barcelona y está jugando bien", declaraba Nadal en rueda de prensa.
El de Manacor dice que la sensación que tiene al llegar a Roma es "fantástica" y reconoce que el torneo ha crecido mucho. "Roma es un torneo especial para todos, antes era un poco más tranquilo y había más pistas para entrenar. Sin embargo, se ha doblado el número de participantes y hoy es un torneo más alto de tabla que antes", dijo.
Nadal, que tras las dificultades de la pasada temporada ha vuelto a triunfar en el Principado de Mónaco y en Barcelona, subraya que "las victorias siempre ayudan" y que se está "divirtiendo en la pista". "Las victorias siempre ayudan, evidentemente. El último mes y algo ha sido muy positivo, he jugado a un nivel alto muchas semanas consecutivas. Esto es importante, estoy divirtiéndome en la pista, estoy entrenando bien y me siento con la ilusión de seguir así adelante", concluyó.