Tres horas y 20 minutos después, Tommy Robredo cedió un partido épico ante Andy Murray en la final del Valencia Open 500 tras la remontada del escocés, que levantó hasta cinco puntos de partido para apuntarse la victoria por 3-6, 7-6(7) y 7-6(8).
El tenista español, exhausto, recibió al británico con una peineta y una sonrisa después del enorme realizado para tratar de ganar el trofeo. Murray se tomó con humor el gesto de su rival y ambos se abrazaron después del partido.