L D (Agencias) Serena Williams tenía un contrato con el fabricante alemán de productos deportivos Puma desde 1998, que le reportaba 12 millones de dólares en cinco años. A pesar de que el contrato publicitario había expirado, la tenista llevó esta temporada la marca alemana a lo largo de la competición.
La marca estadounidense está acostumbrada a este tipo de contratos multimillonarios como ocurrió en su día con el rookie de la NBA LeBron James, a quien pagó 100 millones de dólares por siete temporadas. El acuerdo le permite a la menor de las hermanas Williams ganar todo tipo de bonificaciones económicas de acuerdo a los resultados que consiga en las distintas competiciones y si gana torneos de Grand Slam y vuelve a ser la número uno del mundo.
La ex número 1 del mundo, de 22 años, que ahora ocupa el tercer puesto en la WTA, no disputó este año Wimbledon, debido a molestias en su rodilla, haciéndola pasar por quirófano a principios del mes de agosto. "Estoy bien físicamente y no he cogido peso", asegura la tenista en su página web. "Me encuentro mucho mejor. Mi padre y mi madre no quieren precipitar las cosas", explica.