L D (EFE) En esta primera parte de la biografía del "Pelusa", el jugador se acuerda del partido disputado contra Inglaterra en la semifinal de esta Copa del Mundo y reconoce que el segundo de los goles que él anotó fue "especial". El choque contra el combinado inglés, dice Maradona, se trató de "un día que nunca olvidaré mientras viva. Fue un encuentro", explicó, "muy reñido, muy luchado, con Barnes poniéndonos las cosas difíciles hacia el final. Y con mis dos goles. ¡Mis dos goles!". El argentino subraya el segundo tanto como "el tipo de gol que soñaba con marcar cuando era niño y estaba creciendo en Fiorito".
Además, en la semifinal que vencieron contra los ingleses, el "Pelusa" comenta que derrotar a esta selección fue como jugar una final, "porque más que vencer a un equipo de fútbol, estábamos derrotando a un país". "Por supuesto que antes del partido nos habíamos dicho que el fútbol no tenía nada que ver con las Malvinas, pero todos sabíamos que en la guerra de las Malvinas habían muerto muchísimos niños argentinos, tiroteados como pájaros. Esto era la venganza", dice el jugador, que apunta que la victoria sobre los ingleses "fue como recuperarse un poco" de esta guerra.
En cuanto al segundo gol, Maradona admite que aún hoy en día no puede dar crédito a que pudiese lograr una jugada semejante. "Cuando lo vuelvo a ver, no me puedo creer que me las arreglara para marcar un gol así. Ahora se ha convertido en una leyenda, y como tal se han dicho un montón de chorradas sobre él", añade. Sobre la final del Mundial del 86, que Argentina ganó contra Alemania, el futbolista relata cómo se sintió al finalizar el encuentro: "Se me cayeron las lágrimas. Había llorado en cada momento de mi carrera, pero éste fue el mejor, el más sublime".
Además, en la semifinal que vencieron contra los ingleses, el "Pelusa" comenta que derrotar a esta selección fue como jugar una final, "porque más que vencer a un equipo de fútbol, estábamos derrotando a un país". "Por supuesto que antes del partido nos habíamos dicho que el fútbol no tenía nada que ver con las Malvinas, pero todos sabíamos que en la guerra de las Malvinas habían muerto muchísimos niños argentinos, tiroteados como pájaros. Esto era la venganza", dice el jugador, que apunta que la victoria sobre los ingleses "fue como recuperarse un poco" de esta guerra.
En cuanto al segundo gol, Maradona admite que aún hoy en día no puede dar crédito a que pudiese lograr una jugada semejante. "Cuando lo vuelvo a ver, no me puedo creer que me las arreglara para marcar un gol así. Ahora se ha convertido en una leyenda, y como tal se han dicho un montón de chorradas sobre él", añade. Sobre la final del Mundial del 86, que Argentina ganó contra Alemania, el futbolista relata cómo se sintió al finalizar el encuentro: "Se me cayeron las lágrimas. Había llorado en cada momento de mi carrera, pero éste fue el mejor, el más sublime".