"Nuestro paso adelante en Barcelona será más grande que en cualquier Gran Premio, pero no sería realista pensar que de repente estaremos compitiendo con los mejores. Espero una carrera mejor que la que hice en China y no me importaría obtener un resultado mejor", ha señalado Schumacher, que acabó décimo en el circuito chino.
Pese a que "todas las escuderías llevarán coches mejorados" a Barcelona, el piloto de Mercedes cree que su equipo tiene "mucho potencial". "Después de tres años retirado, me siento extremadamente motivado, así que estoy claramente preparado para afrontar el desafío", ha apuntado Schumacher.