Schumacher no se da por vencido y se apunta la victoria en el GP de Francia para recortar dos puntos a Alonso en el Mundial

(Libertad Digital) Van a costar muy caros los despistes de aquí a que acabe el campeonato. Fernando Alonso sigue líder del Mundial, pero Michael Schumacher ha vuelto por sus fueros de campeón y este domingo se ha apuntado la victoria en el GP de Francia. Alonso acabó segundo, por lo que el alemán el ha recortado dos puntos. Ahora está a 17 del español. El siete veces campeón del mundo ha sumado la octogésima octava victoria de su carrera, la cuarta de este año y su segunda de manera consecutiva. El automovilismo español tiene que estar orgulloso también en esta ocasión de Pedro Martínez de la Rosa. En su primera carrera de la temporada como titular en McLaren, acabó en séptima posición, remontando una con respecto a la salida.

 

Fernando Alonso, desde la salida, se vio tapado por Felipe Massa, el compañero de equipo de Schumacher, que partió segundo, un puesto por delante del asturiano. El alemán tiró con fuerza y desde el principio se vio que si no cometía errores, la victoria estaba en el bolsillo. Es el líder de su equipo y Massa ya cumple los papeles que antes cumplió Barrichello como fiel Sancho Panza del heptacampeón del mundo. La técnica de tres repostajes de la escudería italiana, uno más que Renault, pudo poner en peligro la victoria o al menos dar un final emocionante a la carrera. Lo único que pasó fue que Alonso le quitó el segundo puesto a Massa.

 

La ventaja que acumuló Schumacher durante toda la carrera le permitió llegar al tercer paso por boxes con más de medio minuto de ventaja. Regresó a pista con 18 segundos sobre Alonso. Éste rayó a una gran altura y consiguió acabar segundo y así sólo ceder dos puntos en la clasificación del mundial. Quizás al español le pudo haber beneficiado más una distinta organización de su equipo. Mientras en Ferrari todo el mundo tiene claro que Schumacher es el jefe de filas, en Renault hay gente a la que le cuesta admitir que Alonso lo es. Por ejemplo, en el Gran Premio de Estados Unidos, disputado hace dos semanas, el italiano Giancarlo Fisichella, sin opción alguna de lograr el título, nunca fue un aliado del español. Pudo trabajar para Alonso, pero acabó siendo un enemigo más sobre la pista. Fernando Alonso siempre está solo y Schumacher tiene un escudero de lujo.

En el segundo repostaje Ferrari incluso eligió el momento adecuado para que Massa, que marchaba por delante de Alonso, se detuviera a cargar combustible. Alonso se detuvo después, pero al regresar a la pista se encontró tal tráfico que no pudo aprovechar la circunstancia para, ya sin el tapón de Massa, tratar de acercarse lo máximo posible a Schumacher. Tras este resultado, Alonso sigue una carrera más al frente del campeonato, ahora con 96 puntos, 17 más que Schumacher

Pedro Martínez de la Rosa se finalizó en la séptima plaza, una por delante de la que ocupó en la parrilla, y protagonizó con Mark Webber (Williams-Cosworth) uno de los duelos más emocionantes de la carrera. El español, que sumó sus primeros dos puntos en un campeonato al que acaba de incorporarse, acabó superando al australiano, que lo había rebasado en la salida, en el primer repostaje de ambos, y terminó la carrera con el coche tan castigado que incluso comenzó a despedir fuego cuando ya había cruzado la línea de meta.