El brasileño Massa sufrió serias lesiones en la cabeza en la clasificación para el Gran Premio de Hungría el pasado mes de julio y se perdió el resto de la temporada dejando un puesto vacante en el equipo Ferrari. Schumacher, que se retiró a finales de 2006, no pudo aprovechar la oportunidad debido a una lesión de cuello. "No fue realmente una decisión racional, fue una decisión emocional en la que, en ese momento, pensé 'por qué no, es media temporada, podría ser divertido'", ha asegurado el piloto, de 40 años, en el estadio Nido de Pájaro de Pekín, donde estaba participando de la Carrera de Campeones.
Schumacher ha dicho que había considerado los pros y los contras de regresar tras una conversación con el jefe de Ferrari, Luca Di Montezemolo. "Consideré todos los puntos, en particular que se trataba de Felipe, que es como un hermano para mí. Parte de la razón por la que me retiré fue para entregarle el coche a él porque se merecía permanecer en un equipo con el mejor coche", indicaba el alemán "Así que considerando el hecho de que era él quien tuvo el accidente, quien tuvo que sufrir, fue muy fácil convencerme a mí mismo, así que finalmente dije 'sí, lo intentaré'", añadía.
Pese a abandonar el proyecto de regreso, persistieron los rumores de que aún podría volver si Massa no se recuperaba de sus lesiones para el inicio de la temporada 2010. A esa hipótesis replicó: "Ahora, no".
Schumacher fue a Pekín a defender el título de la Copa de Naciones de la Carrera de Campeones con su compatriota y subcampeón de la Fórmula 1 del 2009 Sebastian Vettel.