L D (EFE) La idea que tiene Rosell es que si la moción de censura contra el presidente del Barcelona, Joan Laporta, y su junta prospera en el referéndum del 6 de julio, él será una opción en las próximas elecciones. Por otra parte, si la moción no prospera, tiene previsto presentarse a las elecciones del 2010.
Rosell ha convocado a los informadores a las 12:30 horas en el hotel Princesa Sofía de Barcelona y finalmente se conocerá oficialmente su posición en el proceso de moción de censura, después de que haya sido reclamado insistentemente por socios, seguidores y medios de comunicación. Uno de los aspectos que ha motivado a Rosell a aparecer en público tiene que ver con el posicionamiento que ha tenido el actual vicepresidente económico del club, Ferran Soriano, después de que se haya filtrado en algunos medios, sin que el interesado lo haya desmentido, que también aspira a la presidencia.
Ante este movimiento de Soriano, Rosell cree que está autorizado para salir a la escena barcelonista y dar a conocer sus planes si en el Barcelona se producen elecciones en breve. Uno de los temores que tenía Rosell y su equipo de trabajo es que se vinculase a él la autoría del voto de censura que han impulsado los socios Oriol Giralt y Christian Castellví. Por eso, la acción de Soriano ha facilitado la salida en público del ex directivo.
Rosell aparecerá este viernes en escena solo en la tribuna ante los medios, en una conferencia en la que aceptará todas las preguntas y en la que se espera la presencia de antiguos compañeros de junta del Barcelona que dimitieron con él en el verano de 2005, como Jordi Monés, Jordi Moix, Xavier Faus y Josep Maria Bartomeu. Además de estos cuatro ex directivos, Rosell también contará en la sala con el apoyo de algunos de los miembros de su futura precandidatura, cuyos nombres no han sido aún facilitados.
Después de este acto ante los medios, la agenda de Rosell en la semana previa al referéndum del voto de censura quedará condicionada a un viaje de negocios que tiene previsto en el extranjero, aún así, se espera que vuelva a aparecer en público.
Sandro Rosell dimitió como vicepresidente deportivo del FC Barcelona en el verano de 2003, y tras él los cuatro anteriores directivos, y ha tenido apariciones muy esporádicas con un discurso crítico ante la junta del Barça y el presidente, Joan Laporta, con quien rompió relaciones.
La de este viernes, sin duda, será la aparición más destacada en los últimos tres años, y la más deseada para muchos barcelonistas, que ven en él el próximo presidente de la entidad.