"Ahora mismo no sé cuál es mi papel en el quipo. Me concentro en trabajar duro y cuidar mi espalda. Y cuando estoy en la cancha juego fuerte para ayudar a mis compañeros", explicaba Fernández en declaraciones al diario Columbian. "Tengo que esperar mi oportunidad, no importa si son cinco minutos, diez o treinta y cinco", añadía.
Rudy ha visto rebajados sus minutos de juego en los últimos partidos y esta temporada está lanzando desde la línea de tres más que el año pasado, hasta el punto de que la mitad de sus tiros son triples. "Le he dicho que tiene que intentar algo más fácil", señaló al respecto su técnico, Nate McMillan, que mostró confianza en que el balear mejorará sus porcentajes de tiro a medida que avance la temporada.