"Ésta es mi última carrera con Williams. Es un poco extraño porque en cuatro años es el único equipo en el que he trabajado", ha indicado Rosberg en el circuito de Yas Marina, que debuta este año en el calendario del campeonato. Su marcha ya se llevaba rumoreando durante mucho tiempo y dos equipos, Brawn GP y McLaren-Mercedes, aparecen en todas las quinielas para convertirse en su próximo destino, aunque de momento el alemán no quiere pronunciarse sobre su futuro. "No quiero hablar de mi futuro, sólo quería decir que no voy a seguir en Williams, porque eso es lo único seguro", señaló Rosberg, que llegó en 2006 a la escudería británica procedente de la GP2.
En sus 69 carreras disputadas, el alemán, hijo del campeón del mundo de Fórmula 1 en 1982, Keke Rosberg, ha conseguido dos podios, ambos logrados la pasada campaña. Sin embargo, ésta ha sido su mejor temporada en el 'gran circo', en la que, a falta de una prueba para acabar el año, es séptimo en el Mundial con 34,5 puntos. Con la marcha del germano, Williams, que lleva desde 2004 sin ganar una carrera, tiene que confirmar a sus dos pilotos para 2010. El brasileño Rubens Barrichello y el debutante alemán Nico Hulkenberg suenan como sustitutos de Rosberg y del japonés Kazuki Nakajima, que todo hace indicar que tampoco seguirá.