L D (EFE) El alquiler de la avioneta sorprendió a los periodistas que lo esperaban en el aeropuerto de la capital del estado de Río Grande do Sul y que se quedaron sin verlo o entrevistarlo.
Allegados al futbolista han advertido de que Ronaldinho tan sólo piensa en descansar al lado de sus familiares en Porto Alegre, por lo que deberá evitar las presentaciones públicas. Sin embargo, el delantero es esperado el próximo sábado en el amistoso que jugadores nacidos en el estado de Río Grande do Sul acostumbran a disputar el día de Navidad en el estadio Beira Río de Porto Alegre.
El jugador de la selección brasileña desembarcaba en su ciudad natal en medio de la polémica provocada por el anuncio del presidente del Gremio, Paulo Odone, de que pretende rendir un homenaje al jugador que inició su carrera en ese equipo tricolor. Tal homenaje es criticado por otros dirigentes del Gremio, club que fue el último en la clasificación del Campeonato Brasileño de este año, lo que le costó su caída a Segunda División. Según los opositores, Ronaldinho abandonó Porto Alegre para irse al París Saint Germain francés en medio de peleas con dirigentes e hinchas del Gremio.
Antes de embarcar rumbo a Brasil, el delantero, cuya actuación ayudó al Barcelona a cerrar el año en el primer lugar de la liga española, afirmaba que el 2004 fue el mejor año de su vida, pero que espera un 2005 mucho mejor.