L D (EFE) Mientras, los miembros del equipo español también aprovechan al máximo las últimas sesiones de entrenamiento que les permitan adaptarse lo mejor posible a la pista especial dura en la que van a disputar la eliminatoria. "Los entrenamientos han sido perfectos y creo que voy a estar en perfectas condiciones el viernes", declara Roddick. "Hasta que no este en la pista no poder conocer con exactitud mi rendimiento, pero soy optimista". El de Nebraska no tiene ninguna duda que va a jugar contra España y lo mismo piensa el capitán del equipo estadounidense Patrick McEnroe.
La misma seguridad tienen los españoles de la participación de Roddick y de ahí que sólo estén centrados en los entrenamientos para llegar a la eliminatoria y dar la gran sorpresa. Tommy Robredo, el jugador de España sobre el que recaerá la mayor responsabilidad de la eliminatoria ante la ausencia de Rafael Nadal, número dos del mundo, dijo que cada vez están teniendo mejores sensaciones en cuanto a la adaptación a la pista dura y rápida. "Poco a poco le vas cogiendo las distancias y las sensaciones a la pista. Es evidente que no es nuestra superficie favorita, pero estaremos listos para jugar en ella", declaraba Robredo después del entrenamiento de la mañana.
Mientras, en la pintoresca ciudad de Winston-Salem, al noreste de Charlotte, el interés por la eliminatoria va en aumento y ya no hay ni una sola entrada para presenciar los partidos que comienzan a partir del viernes. Ya no hay ni un solo boleto disponible para el certamen que se jugará en el Joel Coliseum, un recinto cubierto con capacidad para 14.453 personas. Las entradas se vendieron desde 90 dólares los asientos más baratos, hasta 390 dólares, frente a la cancha.
Estados Unidos, no sólo llega con sus estrellas, sino que también tienen presente la revancha después de perder en Sevilla la gran final en el 2004 ante la escuadra española. La ausencia de Rafael Nadal, por una lesión en su pie derecho, le da una ventaja extra a los locales, que se enfrentan por octava ocasión a los españoles en Copa Davis, pero la misma no ha caído nada bien ni entre los aficionados ni el equipo de Estados Unidos. Con Nadal ausente y jugando en cancha dura o rápida, con recubrimiento acrílico, los apostadores en Las Vegas, Nevada, dan como grandes favoritos a los norteamericanos, quienes no han ganado este certamen desde 1995.
La salida de Nadal no ha estado fuera de la polémica. El capitán norteamericano Patrick McEnroe y el ex número uno del mundo, Jim Courier, criticaron al español por no participar en estos cuartos de final. "La verdad es que Nadal no estará en Winston Salem por asuntos estrictamente de su calendario de competición. Lo que dice de su lesión no es legítimo. No dudo que él quiere ir a casa y prepararse para las canchas de arcilla y eso es desafortunado y terrible para los aficionados que compraron sus billetes para verlo contra nuestro equipo", ha dicho Courier.
Por su parte, McEnroe dijo que estaba "desilusionado" por la decisión de la estrella española de no participar en estos cuartos de final. "Estoy desilusionado. Obviamente (Nadal) no está lesionado. Obviamente se retiró porque se jugará en este país. Esa es la única razón por la que no jugará", dijo McEnroe. Sin embargo, el capitán de la escuadra española, Emilio Sánchez, defiende a Nadal por su ausencia, y más bien criticó el formato que utilizan los organizadores de la Copa Davis.
Tanto Courier como McEnroe también culparon a los organizadores por el formato y las fechas en que se juegan los torneo regulares, pues de es forma muchas estrellas esquivan este torneo, para dedicarle más tiempo a los otros eventos internacionales.
La misma seguridad tienen los españoles de la participación de Roddick y de ahí que sólo estén centrados en los entrenamientos para llegar a la eliminatoria y dar la gran sorpresa. Tommy Robredo, el jugador de España sobre el que recaerá la mayor responsabilidad de la eliminatoria ante la ausencia de Rafael Nadal, número dos del mundo, dijo que cada vez están teniendo mejores sensaciones en cuanto a la adaptación a la pista dura y rápida. "Poco a poco le vas cogiendo las distancias y las sensaciones a la pista. Es evidente que no es nuestra superficie favorita, pero estaremos listos para jugar en ella", declaraba Robredo después del entrenamiento de la mañana.
Mientras, en la pintoresca ciudad de Winston-Salem, al noreste de Charlotte, el interés por la eliminatoria va en aumento y ya no hay ni una sola entrada para presenciar los partidos que comienzan a partir del viernes. Ya no hay ni un solo boleto disponible para el certamen que se jugará en el Joel Coliseum, un recinto cubierto con capacidad para 14.453 personas. Las entradas se vendieron desde 90 dólares los asientos más baratos, hasta 390 dólares, frente a la cancha.
Estados Unidos, no sólo llega con sus estrellas, sino que también tienen presente la revancha después de perder en Sevilla la gran final en el 2004 ante la escuadra española. La ausencia de Rafael Nadal, por una lesión en su pie derecho, le da una ventaja extra a los locales, que se enfrentan por octava ocasión a los españoles en Copa Davis, pero la misma no ha caído nada bien ni entre los aficionados ni el equipo de Estados Unidos. Con Nadal ausente y jugando en cancha dura o rápida, con recubrimiento acrílico, los apostadores en Las Vegas, Nevada, dan como grandes favoritos a los norteamericanos, quienes no han ganado este certamen desde 1995.
La salida de Nadal no ha estado fuera de la polémica. El capitán norteamericano Patrick McEnroe y el ex número uno del mundo, Jim Courier, criticaron al español por no participar en estos cuartos de final. "La verdad es que Nadal no estará en Winston Salem por asuntos estrictamente de su calendario de competición. Lo que dice de su lesión no es legítimo. No dudo que él quiere ir a casa y prepararse para las canchas de arcilla y eso es desafortunado y terrible para los aficionados que compraron sus billetes para verlo contra nuestro equipo", ha dicho Courier.
Por su parte, McEnroe dijo que estaba "desilusionado" por la decisión de la estrella española de no participar en estos cuartos de final. "Estoy desilusionado. Obviamente (Nadal) no está lesionado. Obviamente se retiró porque se jugará en este país. Esa es la única razón por la que no jugará", dijo McEnroe. Sin embargo, el capitán de la escuadra española, Emilio Sánchez, defiende a Nadal por su ausencia, y más bien criticó el formato que utilizan los organizadores de la Copa Davis.
Tanto Courier como McEnroe también culparon a los organizadores por el formato y las fechas en que se juegan los torneo regulares, pues de es forma muchas estrellas esquivan este torneo, para dedicarle más tiempo a los otros eventos internacionales.