L D (EFE) Agassi, segundo cabeza de serie y campeón en Madrid en 2002, barría a Spadea por 6-1 y 6-3 en menos de una hora. Lo hacía sin contemplaciones, vengándose de las dos últimas derrotas que Vincent obtuvo en Cincinnati (1998) y en el Abierto de Australia (1999) y gracias también al cansancio acumulado de su rival, que acabó a última hora del miércoles su duelo contra Rafael Nadal. Fiel a su espíritu de lucha, en busca de su 18 Masters Series, Agassi no dejó apenas opciones a Spadea. Se hizo con el primer set en 26 minutos y, moviendo de lado a lado a su rival, controló un partido que resultó un monólogo para el de Las Vegas.
Antes, Tommy Robredo se impuso en un final espectacular de fuerza y precisión a Fernando Verdasco por 2-6, 6-4 y 6-3 en una hora y 57 minutos, y no por casualidad. El de Hostalrich disfruta esta semana de su mejor clasificación mundial en el puesto 13, pero con el triunfo de este jueves se ha aupado al 12. Está rápido de piernas, es un serio aspirante a jugar los individuales de la final de Copa Davis y, aunque sus comienzos fueron dubitativos ante el empuje de la zurda de Verdasco, culminó el partido pleno de fuerza y coraje.
El duelo sufrió un giro radical cuando Robredo logró romper el servicio de Verdasco en el séptimo juego del segundo set. A partir de ahí su brazo comenzó a soltarse y a distribuir desde el fondo de la pista con gran solvencia. El madrileño superó tres bolas de partido, pero falló en la cuarta una fácil volea en la red. Con 42 encuentros ganados esta temporada, que le han llevado a alzarse con el título del Conde de Godó, además de lograr tres semifinales más, entre las que se incluye la del Masters Series de Cincinnati en agosto y otros tres cuartos, Robredo tiene prácticamente asegurado acabar la temporada entre los veinte mejores del mundo por primera vez en su carrera pero sabe también que tiene a tiro situarse en el top-ten.
Antes, Tommy Robredo se impuso en un final espectacular de fuerza y precisión a Fernando Verdasco por 2-6, 6-4 y 6-3 en una hora y 57 minutos, y no por casualidad. El de Hostalrich disfruta esta semana de su mejor clasificación mundial en el puesto 13, pero con el triunfo de este jueves se ha aupado al 12. Está rápido de piernas, es un serio aspirante a jugar los individuales de la final de Copa Davis y, aunque sus comienzos fueron dubitativos ante el empuje de la zurda de Verdasco, culminó el partido pleno de fuerza y coraje.
El duelo sufrió un giro radical cuando Robredo logró romper el servicio de Verdasco en el séptimo juego del segundo set. A partir de ahí su brazo comenzó a soltarse y a distribuir desde el fondo de la pista con gran solvencia. El madrileño superó tres bolas de partido, pero falló en la cuarta una fácil volea en la red. Con 42 encuentros ganados esta temporada, que le han llevado a alzarse con el título del Conde de Godó, además de lograr tres semifinales más, entre las que se incluye la del Masters Series de Cincinnati en agosto y otros tres cuartos, Robredo tiene prácticamente asegurado acabar la temporada entre los veinte mejores del mundo por primera vez en su carrera pero sabe también que tiene a tiro situarse en el top-ten.
Henman se aleja de la Copa Masters de Houston
Mientras, el británico Tim Henman ha dado un paso atrás en sus aspiraciones de lograr una de las cuatro plazas que están sin asignar para la Copa Masters de Houston al caer frente al croata Ivan Ljubicic por 6-4, 4-6 y 6-2. Henman partía como primer favorito y se marcha de la capital de España con 439 puntos, lejos de los 480 del argentino Guillermo Coria y de los 484 del español Carlos Moyá. Aún le quedan los torneos de Basilea y París Bercy para lograrlo, pero la competencia será dura. Falto de motivación y con evidente desesperación en sus golpes, Henman lanzó varias veces la raqueta contra la pista de green set del Rockódromo de la Casa de Campo, donde Ljubicic, 29 del mundo esta semana, controló la situación, especialmente en el tercer set.
También tiene el billete para cuartos de final el peruano Luis Horna, verdugo el miércoles de Juan Carlos Ferrero, que ha continuado su racha de triunfos al vencer al rumano Andrei Pavel, noveno favorito, por 7-5 y 6-4. Horna, de madre madrileña, se ha convertido en la revelación del torneo. Se impuso primero al habilidoso marroquí Hicham Arazi, tomó la confianza necesaria después para liquidar al defensor del título Ferrero, en su peor momento, y ahora ha dado el paso decisivo al doblegar por segunda vez en su carrera a Pavel. Su rival en cuartos será el ruso Marat Safin, tercer cabeza de serie, que ha apabullado al austriaco Stefan Koubek, por un doble 6-3, en el duelo que ha cerrado la cuarta jornada de competición.
Mientras, el británico Tim Henman ha dado un paso atrás en sus aspiraciones de lograr una de las cuatro plazas que están sin asignar para la Copa Masters de Houston al caer frente al croata Ivan Ljubicic por 6-4, 4-6 y 6-2. Henman partía como primer favorito y se marcha de la capital de España con 439 puntos, lejos de los 480 del argentino Guillermo Coria y de los 484 del español Carlos Moyá. Aún le quedan los torneos de Basilea y París Bercy para lograrlo, pero la competencia será dura. Falto de motivación y con evidente desesperación en sus golpes, Henman lanzó varias veces la raqueta contra la pista de green set del Rockódromo de la Casa de Campo, donde Ljubicic, 29 del mundo esta semana, controló la situación, especialmente en el tercer set.
También tiene el billete para cuartos de final el peruano Luis Horna, verdugo el miércoles de Juan Carlos Ferrero, que ha continuado su racha de triunfos al vencer al rumano Andrei Pavel, noveno favorito, por 7-5 y 6-4. Horna, de madre madrileña, se ha convertido en la revelación del torneo. Se impuso primero al habilidoso marroquí Hicham Arazi, tomó la confianza necesaria después para liquidar al defensor del título Ferrero, en su peor momento, y ahora ha dado el paso decisivo al doblegar por segunda vez en su carrera a Pavel. Su rival en cuartos será el ruso Marat Safin, tercer cabeza de serie, que ha apabullado al austriaco Stefan Koubek, por un doble 6-3, en el duelo que ha cerrado la cuarta jornada de competición.