Riquelme presiona al club para que aclare su situación

L D (EFE) Al afirmar el asado viernes que si no juega en el Villarreal no lo hará en ningún otro equipo europeo, Riquelme iniciaba una campaña de presión contra el presidente del club, Fernando Roig. El dirigente decía en diciembre pasado que Riquelme "es un jugador que tiene que cumplir lo que el club dice y nada más. Si no está dispuesto a hacerlo tendrá muchas dificultades con el presidente del Villarreal".

Mauricio Macri, presidente de Boca, recuerda que su equipo lograba incorporar al jugador como cedido hasta junio que y la entidad bonaerense se había ofrecido en ese momento "para destrabar" un conflicto entre el jugador y Roig.

Riquelme, anticipándose a lo que podría ocurrir a mediados de año, afirmaba el viernes: "En España he vivido tiempos muy felices. Estuve tres años y medio allí y lo pasé bien, me trataron fenomenalmente, como si hubiese nacido en ese lugar" y recordó que le quedan dos años de contrato con el Villarreal. "Allí tengo mi casa y tuve la suerte de que las cosas me salieran bien. Recibí el reconocimiento de toda Europa gracias al Villarreal. Por ello, si no juego en el Villarreal, no juego en otro equipo europeo", aseguraba.

En febrero pasado, el vicepresidente del Boca Juniors, Pedro Pompilio, decía que el objetivo de su club es que Riquelme se quede en el equipo una vez cumplida la cesión del Villarreal. Estas declaraciones han sido minimizadas por el presidente de la entidad, Mauricio Macri, de licencia por su condición de candidato a Jefe de Gobierno de Buenos Aires, al decir que ello "es imposible" por razones económicas, aunque indica que "todo depende de Román".