Colabora

Rijkaard: "Robinho tenía fama en Brasil y Messi empieza ahora"

El entrenador del Barcelona se ha referido al revuelo que han provocado en este inicio de temporada el madridista Robinho y el azulgrana Lionel Messi para precisar que el primero ya tenía fama en Brasil, mientras que el segundo empieza ahora. Frank Rijkaard dice que, en cualquier caso, no es partidario de comparar jugadores y que únicamente lo hacía para "relativizar" la atención que han generado ambos futbolistas y que considera habitual cuando aparece alguno con calidad.

L D (EFE) La apreciación sobre Lionel Messi le sirvió también para destacar su juventud y pedir apoyo para él en los momentos difíciles, en clara referencia a la imposibilidad actual de alinearse con el Barcelona hasta que se clarifique la situación en la que quedan los jugadores asimilados, los extranjeros pero formados en la cantera de un club español.
 
Sobre este asunto, el holandés explicó que el club trabaja para resolverlo y lamentó que Messi se quede por obligación fuera de las convocatorias después de su explosión de este verano. Sin embargo y ante supuestos sobre una hipotética marcha del Barcelona del jugador si no se solventa en breve el problema burocrático, Frank Rijkaard precisó que se ha conversado con el argentino y que, aunque "también tiene mucho interés en que todo se arregle", le ve "como siempre".
 
El asunto estrella de la semana en el club ha sido la renovación de Ronaldinho hasta el 2010, con la que Rijkaard se mostró conforme pese a ser contrario a la firma de contratos de larga duración, "porque siempre hay excepciones". "Me alegro por el jugador, por el club, por que es bueno para todos, y también por los socios, porque se trata de un futbolista que genera ilusión", añadió. La otra ampliación de contrato en la que trabaja la directiva ahora es la del propio Frank Rijkaard, quien únicamente manifestó al respecto que "va bien, muy bien".
 
Otro asunto de la semana han sido el fichaje por el Real Madrid de Sergio Ramos previo pago de su cláusula de rescisión que ascendía a 27 millones de euros. Cuestionado sobre el precio de la operación, Frank Rijkaard consideró que no es algo de su incumbencia: "No es mi dinero". Tampoco quiso el holandés entrar en análisis técnicos del jugador, "porque hay muchos futbolistas de calidad en el mundo", con lo que consideró su deber referirse únicamente a los que entrena en Barcelona.
 
Relacionado con los lesionados del equipo se le planteó el asunto de los cambios en los servicios médicos del club, "un tema a resolver" en palabras del técnico, quien espera pronta solución, aunque todavía no ha conversado con la directiva y está pendiente de una reunión en la que se "aclare" todo.

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario