"No, no y no. No firmé ningún precontrato con el Real Madrid, no firme nada con nadie", asevera Ribéry en una entrevista con el diario Bild.
Cabe recordar que el internacional galo fue tentado en verano por varios clubes europeos, entre ellos el propio Real Madrid, pero el Bayern impuso un veto a una salida anticipada. "Quiero saber si me quedo o me voy", asegura Ribéry, que se pone como límite para conocer su destino el comienzo del Mundial de Sudáfrica.
La directiva del club alemán ha cambiado de opinión y medita trasferirlo un año antes de que quede libre. "O prolonga a final de temporada por varios años o lo vendemos antes de que termine su contrato", defienden en el club bávaro, que espera obtener entre 60 y 80 millones de euros por el traspaso del internacional francés, cuya relación con el técnico holandés Louis van Gaal no termina de llegar a buen puerto.
Ribéry afirma en declaraciones a Bild que hasta ahora todo está abierto y que no se inclina por ninguna salida. "Por lo pronto, lo más importante es volver a jugar y todo lo demás se verá más adelante", ha dicho el cotizado jugador, que el miércoles tuvo que interrumpir una sesión de entrenamiento por problemas en un dedo del pie.
El jugador lleva parado dos meses y medio por diversas lesiones en la rodilla izquierda y tenía pensado reaparecer el próximo sábado en el Allianz Arena frente al Hertha Berlín, en el último partido de la Bundesliga antes del parón invernal, aunque su concurso todavía está en el aire.