L D (EFE) El entrenador brasileño Carlos Alberto Pariera manifestó que "el sabor de ganar a Argentina es indescriptible. Es diferente. Fue muy importante para nuestra confianza. Necesitábamos una victoria de ese porte". "Si hubo una cosa importante en Brasil fue la respuesta defensiva. Argentina, con tres delanteros, apenas exigió a Dida en una ocasión. La defensa se comportó muy bien", destacó Parreira.
Como aspecto negativo, citó "la falta de aproximación" entre sus jugadores, que se evidenció en el primer tiempo con los constantes lanzamientos profundos de la defensa hacia el ataque, sin pasar por la mitad de la cancha. "En el primer tiempo nos faltó aproximación. Faltó al principio confianza para poner el balón en el piso y salir jugando. Pero la situación mejoró en el segundo tiempo", añadió. Parreira sostuvo que Ronaldo "hizo la diferencia en el partido" y agregó que es el "máximo delantero del mundo y afortunadamente juega en la selección brasileña".
Por su parte, el seleccionador argentino, Marcelo Bielsa, afirmó que Ronaldo, autor de los tres goles de la victoria de Brasil por 3-1, fue "determinante en el partido". Bielsa describió un partido de dominio alterno para ambos equipos en los dos tiempos. "En el primer tiempo, el partido fue de dominio argentino. Recuperó bien la pelota el equipo y a partir de ahí tomó el control. En el segundo, perdimos recuperación de pelota y en los últimos quince minutos pudo retomar el balón, pero con más dificultades", explicó el entrenador tras la conclusión del partido disputado en el estadio "Mineirao", de Belo Horizonte.
El técnico argentino afirmó que "nada tenía que objetar" al arbitraje del colombiano Oscar Ruiz, que decretó tres penaltis, transformados en gol por Ronaldo, uno de ellos cuando transcurrían cinco minutos de compensación sobre el tiempo reglamentario.