L D (EFE) "El año que viene será más fácil, no sólo para mí, sino también para el equipo. Este año hemos tenido problemas hasta tener el coche en perfecta condiciones, como yo quería", dice Raikkonen, que logró el título el pasado 21 de octubre al ganar el Gran Premio de Brasil, al que llegó con siete puntos menos que el entonces líder, el británico Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes). "Ya veremos lo que haremos con el nuevo coche. Aún es pronto para decir lo bueno que será. Pero tenemos grandes expectativas. Tenemos buenas sensaciones", agregaba el finlandés.
Al referirse a la nueva reglamentación para 208, que incluye entre otras cosas la anulación del control de tracción, Raikkonen decía: "Cuando llegué a la Fórmula Uno no teníamos control de tracción. Creo que será más divertido y, a la vez, más exigente. Su supresión no dará más oportunidades para adelantar".
Su compañero de equipo, el brasileño Felipe Massa, señala a ese respecto: "Nunca he pilotado coches sin control de tracción, pero será cuestión de acostumbrarse. Ya veremos si hay que cambiar el estilo de pilotar o si hay que hacer modificaciones en los coches".
Mientras, Jean Todt reconocía en Mugello que no habría apostado por el finlandés para ganar el Mundial. "Lo logrado en 2007 es una demostración de nuestra mentalidad. Nunca nos rendimos y creemos en nuestras posibilidades mientras podemos hacerlo", dice.
Al referirse a la última carrera del año en Interlagos, Todt señala: "La última carrera fue increíble. Teníamos que lograr los dos primeros puestos, con Kimi por delante de Felipe Massa, mantener por detrás a (Fernando) Alonso y que (Lewis) Hamilton no acabara más arriba del sexto puesto. Y sucedió". "En 2006 perdimos los títulos (que ganaron Renault y Fernando Alonso) por problemas de fiabilidad. Este año tuvimos más o menos los mismos problemas, pero pensamos en ello y lo analizamos todo", comentaba.