Rafa Nadal refrenda su gran momento al conquistar ante Verdasco el Masters Ciudad de León

L D (EFE) Nadal, al que se le había escapado el triunfo ante Albert Costa en la última final del predecesor de este torneo, disputado los dos años anteriores sobre la moqueta del pabellón Pisuerga de Valladolid, se encontró a un competidor en estado puro, de los que no dan una bola por perdida y con una prodigiosa muñeca izquierda. Curiosamente, se enfrentaban en la final leonesa -con un pabellón de nuevo a reventar con más de 6.500 espectadores-, dos de los tres zurdos, el otro es Feliciano López, que pueden empezar a aparecer entre los diez primeros de la lista de la ATP la próxima temporada.

Fernando Verdasco llegaba a la final tras dejar en la cuneta en cuartos al vencedor de las dos ediciones anteriores, Albert Costa y a Feliciano López, en ambas ocasiones tras remontar un set en contra, lo que daba idea de su carácter ganador y su excelente preparación física para esta cita. Poco a poco el manacorí fue encontrando también la fortaleza de su saque -firmó al final del encuentro siete directos y un buen número que provocaron el error del contrario- y eso condujo a la muerte súbita en la que Nadal parecía tomar la delantera con un 2-0, pero que fue contestado por el madrileño que se colocó con 5-6 y servicio para ganar. En ese momento decidieron los detalles, también la fortuna de un golpe más acertado que el del rival, sufriendo una inoportuna doble falta Verdasco en el peor momento y la balanza se volteó a favor de Rafael.

Con un set a favor, el más joven ganador en la historia de la Copa Davis, jugó con mayor confianza, pero sin que ello supusiera que su rival bajara la guardia, así hasta el sexto juego en el que Nadal parecía dar el golpe definitivo al romper el saque del madrileño y colocarse 4-2. Fue un espejismo dentro del equilibrio de fuerzas, porque Fernando contestó de inmediato con otra ruptura de servicio, que dio paso a dos juegos en blanco -uno por jugador- con sus saques, hasta que de nuevo los detalles decidieron el undécimo juego y la suerte del partido para acabar con 7-5 en el segundo set.