L D (EFE) El jugador español se mostró crítico con su juego: "Había más nervios de lo normal, creo que eso se ha notado. Me causaba un poco de inseguridad, pero es normal, Costa y Moyá me lo habían dicho. Luego me he tranquilizado. Ya he jugado otros como en Wimbledon y en el Abierto de Australia", dijo.
Nadal comentó que no le atosiga ni le molesta la forma en la que el público y aficionados le siguen en París. "No me agobian, estoy muy agradecido a que el público esté conmigo, porque gracias a ellos he ganado muchos partidos. Que me digan que soy favorito en cada rueda de prensa, eso sí me molesta, porque al final termino creyéndomelo y exigiéndome demasiado y eso no puede ser. Es mucho mejor jugar tranquilo sin pensar nada más que en el partido".
Sobre su próximo rival, el belga Xavier Malisse, dijo: "Jugué con él en segunda ronda de Montecarlo, y es un rival peligroso. Es bastante agresivo, y debo estar concentrado y jugar mis armas, que son pegar desde el fondo de la pista, intentar moverlo y que no me domine él". Nadal también añadió que las dos semanas de descanso tras su título en Roma le habían venido muy bien. "Siempre tiene las dos caras, es positiva por si en un caso llegas a la segunda semana, y es negativa porque llevas unos partidos sin jugar y tienes ansiedad por competir", dijo.
Nadal comentó que no le atosiga ni le molesta la forma en la que el público y aficionados le siguen en París. "No me agobian, estoy muy agradecido a que el público esté conmigo, porque gracias a ellos he ganado muchos partidos. Que me digan que soy favorito en cada rueda de prensa, eso sí me molesta, porque al final termino creyéndomelo y exigiéndome demasiado y eso no puede ser. Es mucho mejor jugar tranquilo sin pensar nada más que en el partido".
Sobre su próximo rival, el belga Xavier Malisse, dijo: "Jugué con él en segunda ronda de Montecarlo, y es un rival peligroso. Es bastante agresivo, y debo estar concentrado y jugar mis armas, que son pegar desde el fondo de la pista, intentar moverlo y que no me domine él". Nadal también añadió que las dos semanas de descanso tras su título en Roma le habían venido muy bien. "Siempre tiene las dos caras, es positiva por si en un caso llegas a la segunda semana, y es negativa porque llevas unos partidos sin jugar y tienes ansiedad por competir", dijo.