Una vez más se ha demostrado que cuando Los Angeles Lakers salen al campo mentalizados para realizar su juego de equipo y trabajar en defensa, pueden ganar a cualquier equipo. Y así ha quedado patente en la victoria frente a los Grizzlies en el FedEx Forum de Memphis.
El escolta Kobe Bryant no ha tenido que darle esta vez ningún consejo de ser más agresivo al ala-pívot español Pau Gasol porque el entrenador Phil Jackson lo quiere como es: inteligente, disciplinado y correcto dentro y fuera del campo. Bryant se preocupó de ser él mismo y ayudó al equipo con 19 puntos.
A Pau, en su duelo con su hermano Marc, tampoco le obsesionó el asunto e hizo en el campo las cosas que los Lakers necesitaban de él como equipo. El mayor de los Gasol firmó 17 puntos, mientras que otros cuatro jugadores de los Lakers, entre ellos los titulares Ron Artest, Andrew Bynum y Derek Fisher, también han tenido dobles dígitos.
El veterano base de los Lakers ha estado más productivo que en partidos anteriores en el que ha sido su encuentro consecutivo número 465, la racha más larga para un jugador activo de la NBA. Fisher no se ha perdido un partido oficial de competición desde el 15 de abril de 2005.
Pau Gasol, que hasta el 1 de febrero de 2008 estuvo en las filas de los Grizzlies, jugó 36 minutos para anotar 6 de 11 tiros y 5 de 9 desde la línea de personal. Además, capturó nueve rebotes –siete de ellos defensivos–, repartió dos asistencias y puso dos tapones. Al mejor jugador español de la historia aún se le recuerda como un líder en Memphis. De hecho, tres años ddespués e haber sido traspasado a los Lakers, sigue en poder de las marcas de más puntos, rebotes y tapones después de las seis temporadas en las que estuvo en los Grizzlies.
Por lo demás, elala-pívot reserva Lamar Odom ha hecho su labor de sexto jugador en los Lakers al conseguir un doble-doble de 15 puntos con 11 rebotes para encabezar el juego bajo los aros y la gran labor defensiva que realizó todo el equipo. Precisamente, la presión defensiva que hicieron los californianos en el cuarto período fue lo que cambió la historia del partido y lo rompió a su favor cuando los Grizzlies, después de haberse puesto a sólo dos puntos para empatar el marcador (76-78) con 6:28 minutos para el final, cometieron cinco pérdidas de balón.
Los Lakers, que tienen marca de 36-16, las aprovecharon para conseguir un parcial de 11-0 que dejó el marcador en 76-89 y abrió el camino para asegurar la victoria, la segunda consecutiva, y conseguir empatar a dos la serie entre ambos equipos.
Luego los hombres altos de los Lakers, encabezados por Gasol y Odom, que habían realizado un gran marcaje sobre el ala-pívot Zach Randolph, consolidaron su dominio bajo los aros y aseguraron la victoria. Sin Raldolph de líder anotador –se quedó con sólo ocho puntos (2-14, 0-1 y 4-4)–, sus 12 rebotes bajo los aros ya no fueron decisivos y ahí estuvo otra de las claves del triunfo de los Lakers. Randolph, curiosamente, ha jugado uno de sus peores partidos horas después de ser designado Jugador del Mes de enero en la Conferencia Oeste.
El escolta Sam Young, que ha empatado su mejor marca como profesional con 22 puntos, ha encabezado el ataque de los Grizzlies, que tienen marca de 27-26 y que han perdido el segundo partido consecutivo después de haber firmado cinco victorias seguidas. Tampoco ha podido superar la buena defensa que le hizo Artest al alero Rudy Gay, y sus 18 puntos no iban a ser factor porque no surgió en los momentos decisivos del último cuarto.
Pese a conseguir un doble-doble de diez puntos con doce rebotes, Marc Gasol tampoco estuvo ha estado en el juego ofensivo al quedarse con 5 de 14 tiros de campo y no fue a la línea de personal. Además, repartió tres asistencias y puso dos tapones.
Los Grizzlies, que llegaron al cuarto decisivo con cinco puntos por debajo en el marcador, lograron el parcial de 76-78 con canasta del escolta Tony Allen, pero fue ahí cuando comenzó el calvario de las pérdidas de balón y el acierto de un triple de Artest (76-84), que sentenció.
El partido ha estado marcado también por el anuncio del regreso del base Jason Williams a los Grizzlies cinco años después. El veterano base, de 35 años y conocido como Chocolate Blanco, es uno de los favoritos de Michael Heisley, el dueño de los Grizzlies. Williams estaba sin equipo tras desvincularse de los Orlando Magic el pasado 26 de enero y quedar como agente libre.