Sin embargo, la estrategia del entrenador de los Grizzlies, Lionell Hollins, funcionó a la perfección y la que siempre resulta, dejar que Bryant sea la estrella, que tire todo lo que quiera a canasta, esta vez no fue suficiente.
Pau Gasol, que se enfrentó a su ex equipo, el mismo que le vio triunfar en la NBA antes de llegar a los Lakers para elevar su nivel de proyección como profesional, esta vez se quedó con sólo 10 tantos y nueve rebotes para perder el duelo bajo los aros con su hermano Marc, que sí fue decisivo para Memphis.
Ahí estuvo otra de las claves del triunfo de los Grizzlies, en el dominio bajo los aros con 49 rebotes por 39 de los Lakers, lo que permitió al equipo de Memphis tener más segundas oportunidades de tiros a canasta (82) por 73 para los actuales campeones de liga. Además, los Grizzlies también tuvieron mejor control del balón con sólo 10 pérdidas por 15 para los Lakers, que les iban a costar puntos decisivos.
Surgió también el trío perfecto para el juego de los Grizzlies. El alero Rudy Gay se encargó de ser el máximo encestador al conseguir 25 puntos, mientras que Zach Randolph se encargó de dominar por completo a los hombres altos de los Lakers después de conseguir un doble-doble de 22 tantos y 17 rebotes.
Randolph, sensacional, en todo el partido, tanto en ataque como en defensa, capturó 14 rebotes bajo la canasta de los Grizzlies, iba a ser la auténtica pesadilla para los Lakers. Mientras que Gay se encargó de hacer del Bryant "salvador" y con 29,5 segundos para concluir el partido anotó el triple que le iba a dar la ventaja definitiva a los Grizzlies.
Marc Gasol se convertía también en una muralla defensiva bajo el aro de los Grizzlies al conseguir 10 de los 13 rebotes que aportó en los 33 minutos que estuvo en el campo, con tres tapones. El hermano mediano de los Gasol también logró 11 puntos para conseguir su primer doble-doble del mes de febrero y el vigésimo en lo que va de temporada después de anotar 2 de 5 tiros de campo y 7-12 desde la línea de personal, dio una asistencia y recuperó un balón.
El base novato Lester Hudson se convirtió en el sexto jugador y sorpresa del partido al anotar 13 puntos, su mejor marca como profesional, mientras que todo el banquillo de los Lakers logró sólo 14 tantos, confirmando el gran problema que tienen los campeones de liga con sus reservas.
De ahí que las 16 canastas de 28 tiros de campo de Bryant, incluidos 4 de 7 triples, y 8-13 desde la línea de personal, esta vez no le sirviesen para nada a su equipo.
El alero Ron Artest con 18 puntos y cinco rebotes fue el segundo máximo encestador para los Lakers, pero su último intento de triple con el que buscaba el triunfo del equipo lo falló y confirmó que sólo Bryant tiene la muñeca, la clase y la frialdad única para anotar las canastas ganadoras en sólo décimas de segundo.
Pau no se fue tampoco con buen recuerdo del FedEx Forum porque estuvo siempre controlado y tan solo anotó 4 de 7 tiros de campo y 2-5 desde la línea de persona en los 30 minutos que vio acción. Pero mucho peor le fue al pívot Andrew Bynum con Marc Gasol al conseguir sólo cinco puntos y ocho rebotes en los 26 minutos que estuvo en el campo.
Solamente Bryant, Artest y Gasol tuvieron dobles dígitos para los Lakers (37-12) que completaron con derrota la gira más larga de la temporada de ocho partidos y marca de 5-3 después de haber perdido el primero ante los Cavaliers de Cleveland y los Raptors de Toronto.
Aunque los Lakers tuvieron un 47 por ciento de acierto en los tiros de campo, comparado al 42 de los Grizzlies, anotaron cinco tantos menos desde la línea de personal, pero los rebotes y las perdidas de balón fueron las que al final les hicieron más daño.