Los Angeles Lakers no pasan por su mejor momento en este inicio de temporada, acumula 11 derrotas consecutivas contando con las tres de los playoffs de la pasada campaña, las seis de pretemporada y las dos con la que ha empezado el nuevo curso. A lo que se suman ahora también los problemas de vestuario y las tensiones internas que estallaron en pleno partido ante los Phoenix Suns en el que los angelinos terminaron cayendo por 105-115.
Dwight Howard y Anthony Davis, compañeros de equipo y dos auténticas estrellas consolidadas de la NBA, llegaron a las manos durante un tiempo muerto en el segundo cuarto. Los dos jugadores de los Lakers empezaron a discutir en el banquillo hasta empezar a intercambiar agarrones y empujones en pleno partido. Todos sus compañeros saltaron rápidamente a separarlos pero ya era demasiado tarde, las cámaras captaron los problemas internos del equipo angelino que no termina de funcionar en el parqué.
Magic Johnson, avergonzado
"En mis 42 años asociado con los Lakers jamás había visto algo así", dijo la leyenda del equipo Magic Johnson en sus redes sociales. "Los Lakers tienen un problema de baloncesto y un problema de equipo", sentenció.
"Lo solucionamos de esa manera en ese momento. Simplemente tuvimos un desacuerdo por algo que había pasado en la cancha", expuso Howard, que no volvió a jugar ni un minuto del partido, en sala de prensa después de protagonizar una de las escenas más surrealistas de este inicio de temporada.
Rajon Rondo se encara con un aficionado
Rajon Rondo, base de los Lakers, también tuvo un encontronazo con un aficionado en el Staples Center, otro incidente que nada tuvo que ver con el partido. Durante el tercer cuarto del partido el base mantuvo una discusión con un aficionado que estaba sentado en primera fila del estadio, ya que este le estaba increpando por su discreto partido.
El jugador, a la vez que señalaba al suelo donde el aficionado había derramado parte de su bebida, respondió apuntando al espectador y simulando que le disparaba. El aficionado le apartó la mano con un golpe e inmediatamente fue expulsado del pabellón.
Chris Paul, líder de los Suns
Chris Paul se convirtió este viernes en el primer jugador de la NBA que alcanza los 20.000 puntos y 10.000 asistencias. El resultado final resultó engañoso ya que los Lakers, tirando de orgullo, 'maquillaron' el cierre en el último parcial tras estrellarse en un tercer cuarto en el que fueron perdiendo por 32 puntos (57-89 a falta de 2.04).
En el día de su récord histórico, Paul lideró a los suyos con 23 puntos, 14 asistencias y 5 rebotes en una demostración de inteligencia, saber hacer y veteranía sobre la cancha. A su lado, los Suns dieron un recital en el Staples Center de Los Ángeles gracias a Devin Booker (22 puntos, 5 rebotes y 4 asistencias), Mikal Bridges (21 puntos, 5 rebotes y 3 asistencias) y Deandre Ayton (8 puntos y 15 rebotes).