Dos días después de la muerte de Kobe Bryant y su hija Gianna Maria (13 años), el mundo continúa aún en shock. Miles son las condolencias que le llegan a la familia del exjugador de Los Angeles Lakers desde todas partes del mundo, especialmente del ámbito del baloncesto. Poco a poco vamos conociendo más detalles del suceso ocurrido el domingo en la localidad californiana de Calabasas —a unos 45 kilómetros al norte de Los Ángeles—, como por ejemplo la estrecha relación que tenía Bryant con el piloto del aparato siniestrado, Ara Zobayan, o por qué La Mamba decidió volar junto a Gigi —como también era conocida Gianna Maria—, la segunda de sus cuatro hijas.
Según ha desvelado la revista People, entre Bryant y su mujer Vanessa había un acuerdo secreto por el que nunca volarían juntos en el mismo helicóptero, como medida de seguridad para cerciorarse de que, en caso de accidente, sus hijas siempre conservaran a uno de los dos padres. Un acuerdo, posiblemente pactado por seguridad, que la familia nunca pensó que se haría realidad.
Transcurridas 48 horas del siniestro, ha salido también a la luz el motivo por el que Kobe viajaba en helicóptero con tanta frecuencia; eso sí, solo con el piloto Ara Zobayan, un amigo de confianza. El exjugador explicó en 2018, en una entrevista concedida al jugador de béisbol Alex Rodríguez, por qué prefería este medio de transporte. "Estaba atorado en el tráfico, y me perdía una obra escolar, porque estaba paralizado en el tráfico, y esto empezó a ser cada vez peor. Tuve que encontrar la forma en que igual pudiera entrenar y enfocarme en el oficio; pero no ceder mi tiempo de familia, así que comencé a averiguar sobre helicópteros, y poder ir y volver en 15 minutos, y ahí comenzó", le contó La Mamba a A-Rod.
Entre las víctimas del accidente de helicóptero, además de Bryant, su hija y el piloto, también figuran John Altobelli, entrenador de béisbol de Orange Coast College, su esposa Keri y su hija Alyssa. También estaban presentes una compañera de equipo de Gianna y su madre, Payton, así como Sarah Chester, y la entrenadora de baloncesto femenino Christina Mauser.
Pese a las malas condiciones para volar, caracterizadas por una espesa a la par que peligrosa niebla, un conjunto de audios entre los controladores aéreos y Ara Zobayan confirman que el piloto tenía una autorización especial para volar. En cualquier caso, habrá que esperar a seguir conociendo más detalles del trágico accidente que ha conmocionado al mundo del baloncesto y del deporte en general.