Los Golden State Warriors lo han vuelto hacer. Todo a pesar de la falta de hombres como Kevin Durant, baja por una lesión en la rodilla, y de DeMarcus Cousins, también gran ausencia en la plantilla de Steve Kerr. Han vuelto a plantarse en unas finales de conferencia y se vuelven a colocar a un solo paso de intentar lograr un nuevo anillo para la franquicia. Lo han hecho a costa de unos Houston Rockets que han remado demasiado para no obtener ningún premio; hundidos en moral por una pareja que se hacen llamar 'splash brothers' (en español, los hermanos splash), formada por Stephen Curry (33 puntos) y Klay Thompson (27 puntos).
Los Warriors de antaño asomaron ayer sobre el parqué del Toyota Center, porque como ya se ha mencionado, Durant estaba siendo la punta de lanza en ataque y el hombre mejor valorado en todos y cada uno de los encuentros que disputaban los Dubs. Sin embargo, el marcador global de la eliminatoria ha sido de 670-659, un resultado muy apretado teniendo en cuenta el 4-2 en el balance de victorias favorable a los de la Bahía. Es una derrota durísima de encajar, quizás incluso más que la de la última temporada cuando los Rockets se dejaron remontar un 3-2 a favor. Sin Durantula ni Boggie Cousins, con los Warriors más terrenales de los últimos tiempos y con Harden convertido en una máquina perfecta de anotar, no han sido capaces de lograr la machada y se quedan, un año más a las puertas de las tan ansiadas finales de la NBA.
Curry escribió su nombre en la historia, una vez más
Primeras noticias de Stephen Curry en estos playoffs. Es así. Uno de los jugadores más ofensivos de toda la Liga, no estaba encontrando su juego, pero eclosionó cuando su equipo más le necesitaba, evitando irse de vacaciones antes de tiempo. En el último cuarto del encuentro firmó 23 puntazos, con algún triple que dejó boquiabierto a sus rivales. Fueron 33 en total, una cifra que, unida a la de Klay Thompson (27), hace casi la mitad de los puntos para su equipo.
Un mago nunca llega tarde, ni pronto. Llega exactamente cuando se lo propone.
Stephen Curry anotó 33 puntos, todos en la segunda mitad y 23 de ellos en el último cuarto, para sellar el pase de los Warriors a la Final del Oeste. #TiempoDePlayoffs pic.twitter.com/492zeI4N3a
— NBA en Movistar+ (@MovistarNBA) May 11, 2019
En la contrapartida se encontraba James Harden, que pese a sus 35 puntos, llegó exhausto al final del encuentro y, en general, cansado de piernas para este tramo final de temporada. Ha sido el jugador que tiró del carro de su equipo cuando más se le necesitaba y ese desgaste lo ha terminado acusando en estos últimos partidos. La candidatura para el MVP para él puede haber puesto punto y final. Queda en manos de Giannis Antetokounmpo seguir haciendo méritos para consagrarse entre los mejores jugadores de la Liga.