Parece que el Real Madrid ha encontrado otro embajador internacional para su marca y es, nada más y nada menos, que Kristaps Porzingis, la estrella de los New York Knicks de la NBA. El pívot tuvo la mala fortuna, tras machacar el aro ante Antetokounmpo, de caer sobre el pie del jugador de los Bucks y doblarse la rodilla. Rotura de ligamentos internos de la rodilla izquierda. "Intento mirar hacia delante, no anclarme en el pasado. He visto la jugada miles de veces. Sé perfectamente cómo me sentí, lo que ocurrió y no quiero huir de ello. Es algo que no pude evitar que pasara", declaró en el vídeo para The Players Tribune.
Justo tras la lesión, el letón decidió operarse de la rodilla cuanto antes para comenzar su recuperación y ahora, cuenta, se acuerda del momento cada vez que ve la cicatriz. "La cicatriz va a estar ahí, pero lo importante es que no esté dentro de mi cabeza.No quiero pensar en mi rodilla cuando regrese a la pista", asevera. También ha empezado nuevas rutinas de trabajo y practicando yoga para volver lo más fuerte posible.
"I've seen the play a thousand times, I know exactly how it felt and I'm not shying away from it."@KPorzee tore his ACL on February 6th and is embracing the challenge of his recovery. pic.twitter.com/CXn5LSEOTh
— The Players' Tribune (@PlayersTribune) July 25, 2018
Ahora bien, a Porzingis se le vio a lo largo de la temporada regular en varios partidos de Liga Endesa. La razón fue porque estaba entrenándose en las instalaciones de Valdebebas, reforzando su rodilla. Pero, ¿por qué Madrid? "La principal razón por la que quería recuperarme en Madrid era poder usar las instalaciones del Real Madrid, uno de los mejores, sino el mejor, club del mundo. Aquí tenemos todo lo que necesito y mi familia está para cuidarme. No puedo quejarme de vivir aquí", concluyó.
Aún con la incógnita de conocer cuando se producirá su regreso a las canchas, Porzingis es ambicioso y desea pelear tanto por el MVP como por el anillo de campeón de la NBA.