Malas noticias las que llegan de la NBA. El ala-pívot Chris Bosh, doble campeón con los Miami Heat e internacional con Estados Unidos, se encuentra ingresado en un hospital de Miami, aquejado de un tromboembolismo alojado en uno de sus pulmones.
Tras varios días aquejado de dolor torácico y una fatiga extrañamente excesiva, Bosh decidió acudir a un hospital en el que ha sido diagnosticado de una patología que recientemente ha afectado a otros jugadores de baloncesto, como el ex barcelonista Pete Mickeal, u otros NBA viejos conocidos del público español como el brasileño Anderson Varejao o el bosnio Mirza Teletovic.
En caso de confirmarse el diagnóstico, la patología que sufre Bosh daría por finalizada la temporada del ala-pívot texano, pues debería permanecer en torno a los seis meses alejado de las pistas. Sin duda, un serio varapalo para unos Miami Heat irregulares toda la temporada y en los que Bosh era su principal referente junto a Dwayne Wade, en el día siguiente a que la franquicia incorporase al esloveno Goran Dragic, en lo que suponía un importante salto de calidad de cara a las aspiraciones del finalista en las tres últimas temporadas.
Las reacciones en la NBA no se han hecho esperar, más aún después de la reciente muerte con apenas 52 años del ex jugador Jerome Kersey esta misma semana, precisamente por el mismo motivo que ahora afecta Bosh, y varios jugadores, como su ex compañero LeBron James, ya han enviado mensajes de apoyo al zurdo de los Heat, que el pasado fin de semana incluso participó en el All Star Weekend, tanto en el partido del domingo, donde disputó once minutos en el equipo de la Conferencia Este, como en el torneo de tiro por equipos, donde junto al mítico Dominique Wilkins y la jugadora de la WNBA Swin Cash, logró el triunfo por tercer año consecutivo.