El ala-pívot Kevin Love ha vuelto a ser el líder del ataque de los Minnesota Timberwolves, que se han impuesto a domicilio por 95-126 a los Sixers de Filadelfia.
Love aportó 26 puntos -16 en el tercer período-, mientras que el escolta Kevin Martin llegaba a los 18 tantos. El pívot montenegrino Nikola Pekovic ha firmado un doble-doble de 16 tantos y 14 rebotes, mientras que el alero Corey Brewer lograba 15 puntos.
Por su parte, el base puertorriqueño José Juan Barea ha vuelto a cumplir su papel de sexto jugador del equipo al aportar 13 puntos en los 19 minutos que disputó. Otros dos reservas, el ala-pívot Dante Cunningham y el base ruso Alexev Shved, encestaron 10 tantos cada uno, mientras que el pívot francés Ronny Turiaf hizo una gran labor bajo los aros al capturar nueve rebotes y poner dos tapones.
El base español Ricky Rubio disputó 25 minutos en los que aportó cuatro puntos y repartió ocho asistencias. Rubio siguió sin tener estar inspirado en sus lanzamientos al anotar sólo 2 de 8 tiros de campo, aunque capturó tres rebotes, recuperó un balón y perdió otro.
La victoria, la sexta en los últimos 10 partidos disputados, permite a los Timberwolves (17-17) volver a tener marca positiva y consolidarse en el tercer lugar de la División Noroeste.