Por fin, una gran noche española en la NBA

La clase de los hermanos Marc y Pau Gasol volvió a sobresalir en la jornada de la NBA al convertirse ambos en jugadores decisivos con sus respectivos equipos de los Grizzlies y los Lakers, que consiguieron sendos triunfos.

El primero en tener una buena jornada fue el pívot Marc Gasol, que impuso de nuevo su poder físico y clase en el partido que los Grizzlies ganaron por 101-77 a los Nets de Brooklyn. Memphis volvió a dar su mejor versión de equipo, en el que el hermano mediano de los Gasol esta vez fue el líder indiscutible al conseguir 20 puntos y nueve rebotes.

Marc Gasol jugó 34 minutos, y anotó 10 de 15 tiros de campo, repartió dos asistencias y puso un tapón. La inspiración encestadora de Gasol contagió a otros seis jugadores que lograron números de dos dígitos y como equipo un 52 (47-90) por ciento de acierto en los tiros de campo y el 44 (4-9) de triples, comparados al 41 (29-71) y 18 (3-17), respectivamente, de los Nets.

Más tarde saltaría a la pista del Staples Center de Los Ángeles su hermano Pau Gasol, aunque siguió de reserva. Pero en cuanto Mike D'Antoni le dio entrada hizo que su ayuda y aportación fuesen importantes en la victoria que los Lakers consiguieron por 102-84 ante los Jazz de Utah.

El hermano mayor de los Gasol disputó 25 minutos y aportó 15 puntos al anotar 7 de 8 tiros de campo y 1 de 4 desde la línea de personal. Gasol también hizo una gran labor bajo los aros al capturar siete rebotes –seis fueron defensivos–, repartió tres asistencias y recuperó un balón.

Mientras que el ala-pívot congoleño nacionalizado español Serge Ibaka también disfrutó de la victoria con su equipo de los Oklahoma City Thunder, que se impusieron a domicilio (95-105) ante los Sacramento Kings. Ibaka realizó una gran labor de equipo en los 26 minutos que jugó al aportar 14 puntos y ocho rebotes –cinco fueron defensivos–, recuperó dos balones y puso dos tapones.

Por último, el base Ricky Rubio, que superó el "desencuentro" que tuvo con el entrenador interino de los Timberwolves, Terry Porter, siguió de titular, y aunque tuvo más minutos de juego no pudo ser de nuevo factor ganador y su equipo perdió por 114-101 ante los Washington Wizards.

Rubio antes del partido dijo que estaba todo aclarado con Porter, al que le pidió "disculpas" por la manera como se manifestó tras el partido frente a los Nets al reclamar más minutos de juego. "No creo que fuese ni tan siquiera algo sobre lo que hacer un problema", comentó Porter. "La reacción de Ricky fue la de cualquier jugador que muestra frustración al no poder estar en el campo durante los minutos finales del cuarto periodo".

Porter y el jugador español se reunieron el jueves antes de viajar a Washington y todo quedó aclarado y solucionado entre ambos.

Rubio esta vez jugó 31 minutos llevando a cabo una gran labor en la dirección del juego al repartir seis asistencias, capturar cinco rebotes –tres fueron ofensivos–, recuperar un balón y perder cinco.

Rubio jugó tres minutos más del promedio que hasta ahora le tienen permitido en su fase de adaptación a la competición tras la grave lesión que sufrió de ligamentos en la rodilla izquierda y que le tuvo apartado del equipo cerca de nueve meses.