"Felicito a Andy, que está completando una temporada extraordinaria, pero para mí eso no cambia mucho mi perspectiva, ni mis objetivos", ha señalado en una entrevista con la organización del Masters Series de Cincinnati tras entrenar con el ecuatoriano Nicolás Lapentti.
Además, el manacorí ha confesado que está "tan feliz como hace tres días, cuando era número dos". "Por supuesto que me gustaría recuperar mi ránking en el futuro, pero el número tres no está tan mal", ha asegurado.
Y es que a Nadal, lo que le hace "feliz es estar en condiciones de jugar y de disfrutar del tenis". "Pasé cinco años como número dos y casi un año como número uno, así que el ránking es importante, pero no lo más importante. Para mí lo más importante es estar en condiciones de competir y ganar un torneo importante", ha subrayado.
El tetracampeón de Roland Garros reconoce que el Abierto de los Estados Unidos "es muy importante", pero que tiene claro que desea jugar "un buen final de temporada".
El balear también ha recordado que es "imposible empezar de cero y llegar a cien", en referencia a su derrota ante el argentino Juan Martín Del Potro en los cuartos de final de Montreal, su primer torneo tras dos meses y medio de ausencia de las pistas. "Necesito hacer progresos cada día", ha indicado en rueda de prensa.
"Necesito ir tranquilo, lo más importante es estar bien físicamente. Si trabajo duro y si puedo hacerlo con la intensidad con la que lo hice en el pasado, voy a tener opciones de estar otra vez a mi mejor nivel, si no este año, espero que el próximo", ha añadido.
El número tres del mundo ha apuntado que se encuentra "bien" y que fue un "buen regreso" su presencia en Canadá. "Creo que he tenido la temporada bajo control hasta mi lesión. Estaba jugando bien, rozando casi la temporada perfecta, pero después de la lesión, fue duro. Fui el número uno este año antes de mi lesión y sé que si estoy listo, tendré opciones de volver a serlo", ha sentenciado.