L D (EFE) "Yo nunca había jugado así en hierba, como hoy, y creo que en todo momento he estado jugando a un muy alto nivel. A él le ha costado entrar en ritmo. Pero esto es un balance, cuando uno baja, el otro sube", explicó el mallorquín sobre su rendimiento en la pista 2, el “cementerio de los campeones”. Cuando se vio con el marcador en su contra, el jugador reconoció que no se sintió en su mejor momento, una situación que varió en las últimas mangas. "Quizá en los últimos 3 sets he jugado el mejor tenis sobre hierba de toda mi vida", dijo.
"Es una victoria importante, porque Youzhny es muy buen jugador en superficies rápidas -explicó Rafa- y estoy especialmente feliz por cómo jugué, nunca he jugado como lo he hecho en los últimos tres sets en mi vida". Nadal comentó que la "clave" del encuentro fue su decisión de variar el enfoque. "Yo creo que la clave ha sido la decisión a la hora de encarar los puntos. He cambiado totalmente, he jugado más agresivo todas las bolas", observó. Preguntado por el aparente problema de espalda que padecía el ruso, y por el que tuvo que ser atendido en la cancha en tres ocasiones, Nadal comentó.
"Lo siento por él si ha tenido algún problema, pero en cualquier caso, yo he jugado bien y no sé si esto a él le ha afectado. Igualmente -explicó-, yo he hecho un gran partido y he jugado a un nivel muy, muy alto y lo importante en mi caso es eso". El número dos insistió en que rindió "a un nivel muy alto, atacando sin fallar prácticamente ninguna bola, metiendo muchos primeros servicios y bastante bien pero en todo momento he estado ahí luchando aunque el partido estaba difícil". El jugador reveló que en todo momento, cuando tenía el marcador en contra, continuó "animándose" y "tratando de darle la vuelta al partido" hasta que aprovechó la primera ocasión de break.
Preguntado por su próximo rival, el checo Tomas Berdych, con quien el jugador tuvo tiranteces en Toronto y en Madrid, el año pasado, Nadal quiso aclarar que él no es "partidario de venganzas y todo eso". "Y Berdych no creo que sea ni mucho menos un mal tipo, sinceramente. Yo creo que actuó mal tanto en Toronto como en Madrid, mirándome a la cara muchas veces, pero son cosas de los partidos, situaciones que van pasando y yo por mi parte, ya lo dije en Montecarlo, yo hice mal en decir lo que dije".
"Ahora me lo hubiera guardado para mí porque no es bueno decir nada en caliente. Yo rectifico. Yo le he felicitado por el partido de hoy y por Halle", concluyó Nadal, que comentó que el checo también le había devuelto la felicitación por su victoria sobre Youzhny. De Berdych, además, resaltó que es un "jugador increíble" y apuntó que el checo es "el favorito" para el enfrentamiento de cuartos de final "por la superficie".
"Yo trataré de hacerlo lo mejor que pueda va a ser un partido muy duro", afirmó. Con cada victoria, recordó, "te aumenta la confianza y especialmente después de jugar como lo he hecho hoy, aunque nunca sabes lo que va a ocurrir mañana". Sobre su experiencia en la pista 2, "el cementerio de los elefantes" o el "cementerio de los campeones", el mallorquín dijo que le resultó "un poco raro" jugar ahí. "Es un poco más pequeña y la sensación es diferente. Sientes más la bola, pero hubo una atmósfera genial y la gente animaba mucho", añadió.
"Es una victoria importante, porque Youzhny es muy buen jugador en superficies rápidas -explicó Rafa- y estoy especialmente feliz por cómo jugué, nunca he jugado como lo he hecho en los últimos tres sets en mi vida". Nadal comentó que la "clave" del encuentro fue su decisión de variar el enfoque. "Yo creo que la clave ha sido la decisión a la hora de encarar los puntos. He cambiado totalmente, he jugado más agresivo todas las bolas", observó. Preguntado por el aparente problema de espalda que padecía el ruso, y por el que tuvo que ser atendido en la cancha en tres ocasiones, Nadal comentó.
"Lo siento por él si ha tenido algún problema, pero en cualquier caso, yo he jugado bien y no sé si esto a él le ha afectado. Igualmente -explicó-, yo he hecho un gran partido y he jugado a un nivel muy, muy alto y lo importante en mi caso es eso". El número dos insistió en que rindió "a un nivel muy alto, atacando sin fallar prácticamente ninguna bola, metiendo muchos primeros servicios y bastante bien pero en todo momento he estado ahí luchando aunque el partido estaba difícil". El jugador reveló que en todo momento, cuando tenía el marcador en contra, continuó "animándose" y "tratando de darle la vuelta al partido" hasta que aprovechó la primera ocasión de break.
Preguntado por su próximo rival, el checo Tomas Berdych, con quien el jugador tuvo tiranteces en Toronto y en Madrid, el año pasado, Nadal quiso aclarar que él no es "partidario de venganzas y todo eso". "Y Berdych no creo que sea ni mucho menos un mal tipo, sinceramente. Yo creo que actuó mal tanto en Toronto como en Madrid, mirándome a la cara muchas veces, pero son cosas de los partidos, situaciones que van pasando y yo por mi parte, ya lo dije en Montecarlo, yo hice mal en decir lo que dije".
"Ahora me lo hubiera guardado para mí porque no es bueno decir nada en caliente. Yo rectifico. Yo le he felicitado por el partido de hoy y por Halle", concluyó Nadal, que comentó que el checo también le había devuelto la felicitación por su victoria sobre Youzhny. De Berdych, además, resaltó que es un "jugador increíble" y apuntó que el checo es "el favorito" para el enfrentamiento de cuartos de final "por la superficie".
"Yo trataré de hacerlo lo mejor que pueda va a ser un partido muy duro", afirmó. Con cada victoria, recordó, "te aumenta la confianza y especialmente después de jugar como lo he hecho hoy, aunque nunca sabes lo que va a ocurrir mañana". Sobre su experiencia en la pista 2, "el cementerio de los elefantes" o el "cementerio de los campeones", el mallorquín dijo que le resultó "un poco raro" jugar ahí. "Es un poco más pequeña y la sensación es diferente. Sientes más la bola, pero hubo una atmósfera genial y la gente animaba mucho", añadió.