Moyá cae ante James Blake en la final de Sydney antes de volver a verse las caras en el Abierto de Australia

El tensita estadounidense James Blake se ha adjudicado el torneo masculino de tenis de Sydney (Austalia) al derrotar al español Carlos Moyá por 6-3, 5-7 y 6-1, en una hora y 55 minutos y ante los 11.000 espectadores que han llenado la pista central del Parque Olímpico. En un intenso encuentro, el neoyorquino se ha adjudicado por segunda vez consecutiva el torneo antesala del Abierto de Australia, primer 'Grand Slam' del año, en el que volverá a enfrentarse al mallorquín en la primera ronda.

L D (EFE)

Pese a la derrota, Moyá ofreció un tenis de altísima calidad en el segundo set, en el que, después de ir con desventaja de 4-0, remontó hasta hacerse con la manga. En el primer set, Blake rompió el saque de Moyá en el primer juego y en el tercero cometió tres doble faltas y salvó una bola de ruptura para ponerse en ventaja de 3-1. En el séptimo juego,e l español tuvo la posibilidad de romper el saque del estadounidense en dos oportunidades, pero sin éxito.

En el segundo set, con 4-0 para Blake tras hacerse con el servicio de Moyá en el primer y tercer juegos, el mallorquín tuvo una extraordinaria reacción y ganó los tres siguientes juegos. Al final del octavo juego, con Blake en ventaja de 5-3, los aficionados, al unísono, comenzaron a corear el nombre de Carlos como muestra de apoyo al tenista español. En la tercera manga Moyà no pudo mantener el ritmo y dio muestras de desgaste. En ese momento, Blake pasó a dominar después de romper el saque de Moyá en el primer y quinto juego y alcanzó su segundo título consecutivo en Sydney.

Moyá dijo después de la derrota que había caído ante un gran rival: "No se me dio hoy porque tuve un gran rival enfrente que jugó un gran partido. Pero le puse las cosas difíciles a pesar de todo. El venía con mucha confianza, estaba más fresco físicamente, aunque, para ser sincero, lo físico no fue un problema para mí, a pesar de los partidos largos que tuve en el torneo".

Sobre si el hecho de que Blake llegase a la final sin haber jugado su semifinal ante el austríaco Jurgen Melzer pudo ser una ventaja, Moyá dijo: "James llegó a la final habiendo jugado alrededor de tres horas en todo el torneo. Y eso, a la hora que el partido se equilibra y se iguala, puede jugar a tu favor. De cualquier manera, a pesar de haber tenido partidos de tres sets durante toda la semana, llegué muy bien físicamente a la final. En realidad, jugué un buen partido pero él fue superior".

Respecto a la remontada que protagonizó a partir del quinto juego del segundo set, el mallorquín señaló: "Quizá él se relajó un poco. Yo di mis últimas fuerzas y decidí jugármela. Pude remontar y ganar la segunda manga, pero en la tercera, a pesar de sentirme bien, él se me escapó y no pude recuperarme". "La clave fue esa, sus escapadas a principios de cada set. Si le hubiera aguantado un poco al inicio de los mismos, habría tenido posibilidades de ganar", añadió. "Es un buen comienzo de año. Haber llegado a la semifinal de Chennai y a la final aquí en Sydney te da confianza para afrontar el resto de la temporada", concluyó Moyá.

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