Mourinho, recibido en Barcelona al grito de "traductor, traductor"

L D (EFE) Los aficionados azulgrana se referían, de esta forma, a sus comienzos, ya que Mourinho se unió a Bobby Robson, en el Sporting de Lisboa, como traductor del técnico británico, con quien posteriormente llegó al Barcelona.

Mourinho, que apareció el primero por la puerta de salidas de la terminal, no respondió a las preguntas que se le efectuaron y protegido por un cordón policial subió al autocar que, minutos después, llevó a la expedición a un hotel de la Ciudad Condal.

Durante los diez minutos que el entrenador del Chelsea tuvo que esperar en el autocar la salida de éste fue nuevamente increpado por un reducido grupo, de los algo más de centenar de aficionados que esperaban la llegada del equipo inglés.