En la carta remitida a la Asociación de Entrenadores de Portugal, Mourinho resume su "tristeza y frustración" por no haberse podido hacer cargo de la selección de su país. "Soy más portugués que entrenador, para que no haya dudas. Por un par de días me sentí y pensé como entrenador de Portugal", afirma Mourinho.
Sin embargo, entiende la postura del Real Madrid: "Tengo que reconocer que el Real Madrid es una institución gigante, que me paga y que no puede correr riesgos delante de sus socios y aficionados. Permitir que su entrenador, aunque sea por unos días, deje su hábitat de trabajo y divida sus concentración y sus capacidades es impensable".
Además, el entrenador del Real Madrid ha mostrado todo su apoyo al nuevo seleccionador luso, Paulo Bento, al que pide "coherencia en la construcción de un modelo de equipo adaptado a las características de los portugueses que están a su disposición".
El entrenador portugués cuenta que sintió "orgullo" cuando la Federación Portuguesa de Fútbol (FPF) le contactó para ser seleccionador y subraya que el apoyo popular en su país le impresionó. "Me llevó, por primera vez en mi vida profesional, a decidir de una forma emocional y no racional, abandonando, aunque temporalmente, un proyecto de carrera que me llevó hasta donde me llevó", asegura.