L D (EFE) En una entrevista publicada este martes por La Vanguardia , Mourinho asegura sentirse mal. "He sido acusado sin que tengan pruebas (..), han tomado partido sin escucharnos y nosotros ya estamos condenados incluso antes de celebrarse el juicio de la UEFA, que tiene que analizar e investigar los hechos", insiste.
Todo se remonta al pasado 23 de febrero, cuando, después del Barcelona-Chelsea (2-1) disputado en el Camp Nou, el conjunto inglés acusó al colegiado Anders Frisk y al entrenador del Barcelona, Frank Rijkaard, de haber mantenido una conversación en los vestuarios durante el descanso. "Informamos simplemente de lo que vimos, no en mi caso porque yo no lo pude ver, pero los que trabajan conmigo lo vieron, yo me lo creo. Si no fuera así, no serían mis ayudantes, mis colaboradores o jefes de seguridad. Ahora tenemos que esperar con tranquilidad a ver qué pasa", asegura el técnico portugués.
En un mensaje a los seguidores del Barcelona, Mourinho dice ser "uno de ellos", por los años en los que vivió en la Ciudad Condal y trabajó allí. "Mi hijo nació en Barcelona y es catalán. Por todo eso, el Barça será para mí siempre algo especial", recuerda. Después de esa declaración de intenciones, el entrenador del Chelsea vuelve a la carga al asegurar que "todo lo que pasó yo lo olvido, lo que no se puede olvidar es el hecho de que cada semana nosotros jugaremos y ellos estarán en casa, pero el fútbol es así".
Mourinho cree que el Barcelona será "con casi toda certeza" campeón español, lo cual define como "el paso más importante para que puedan olvidar el fracaso de los últimos años".
Todo se remonta al pasado 23 de febrero, cuando, después del Barcelona-Chelsea (2-1) disputado en el Camp Nou, el conjunto inglés acusó al colegiado Anders Frisk y al entrenador del Barcelona, Frank Rijkaard, de haber mantenido una conversación en los vestuarios durante el descanso. "Informamos simplemente de lo que vimos, no en mi caso porque yo no lo pude ver, pero los que trabajan conmigo lo vieron, yo me lo creo. Si no fuera así, no serían mis ayudantes, mis colaboradores o jefes de seguridad. Ahora tenemos que esperar con tranquilidad a ver qué pasa", asegura el técnico portugués.
En un mensaje a los seguidores del Barcelona, Mourinho dice ser "uno de ellos", por los años en los que vivió en la Ciudad Condal y trabajó allí. "Mi hijo nació en Barcelona y es catalán. Por todo eso, el Barça será para mí siempre algo especial", recuerda. Después de esa declaración de intenciones, el entrenador del Chelsea vuelve a la carga al asegurar que "todo lo que pasó yo lo olvido, lo que no se puede olvidar es el hecho de que cada semana nosotros jugaremos y ellos estarán en casa, pero el fútbol es así".
Mourinho cree que el Barcelona será "con casi toda certeza" campeón español, lo cual define como "el paso más importante para que puedan olvidar el fracaso de los últimos años".