Pilotos y monoplazas se han presentado en sociedad y han dejado ver algunos de sus secretos mejor guardados, esos con los que pretenden sorprender al adversario. Los primeros en encender los focos fueron los Renault, pero en las últimas 72 horas hemos visto los dos coches de Ferrari, de Mercedes, Williams, Force India y por su puesto también los McLaren. Todos en general se estrenarán esta semana en los test de Montmeló con muchas novedades, tanto en el ámbito aerodinámico como en el mecánico. Y echando un vistazo rápido a la aerodinámica podríamos decir que hay dos tendencias, la representada por Mercedes y Williams que presentan un morro más fluido y sin grandes cortes, sin duda un diseño continuista. ¡Para que van a cambiar si el coche funciona de maravilla! Muy al contrario del diseño presentado por Ferrari y también por McLaren que han sorprendido con un morro más abrupto acompañado de pontones más estrechos.

Pero tan importante es el traje como lo que esconde, sobre todo en el caso de Honda que tiene puestas todas sus esperanzas en su nuevo motor, más potente y supuestamente con todos los problemas del ERS solucionados. Aunque las malas lenguas hablan de falta de fiabilidad y quizás sea por eso que desde la escudería anglo- japonesa no han reparado en gastos para los test de los próximos días y han llevado hasta el circuito catalán un motor para cada día, es decir, ocho motores para ocho jornadas de entrenamiento.

EL reto es múltiple, Mercedes mantenerse en el Olimpo, Ferrari asaltarlo y McLaren poder codearse con los de arriba y dejar de arrastrarse por la parrilla en modo chicán móvil. Muchos retos o de difícil consecución para tan poco test, sólo ocho en menos de una semana de diferencia entre ellos, lo que limita la capacidad de reacción de los equipos, y en el mismo trazado que también determina la puesta a punto. Aunque es de justicia decir que Montmeló puede que sea el circuito más equilibrado para poner a punto a un monoplaza.

Las cartas están echadas y ahora sólo queda comenzar la partida.